El actual estancamiento que enfrenta el proceso de descolonización puertorriqueña, debido al difícil prospecto de la “Ley de Autodeterminación de Puerto Rico” de las congresistas Nydia Velázquez y Alexandria Ocasio Cortez y la fallida “Ley de Admisión de Puerto Rico como estado” de la Comisionada Residente Jennifer González y el Congresista Darren Soto, está abriendo otras vías y una nueva conversación en Washington DC que no existía hace unos meses. Una conversación que esta moviendo el foco del debate público respecto al tema del estatus, de las posibilidades de la estadidad a un debate más profundo sobre los modelos de soberanía que podría proponer Puerto Rico alineado a los intereses estratégicos de los Estados Unidos.
Mientras las organizaciones puertorriqueñas a favor de la soberanía continúan visitando las oficinas del Congreso para explicar las posibles fórmulas de consenso, la opción política de la Libre Asociación está llamando la atención de periódicos estadounidenses y puertorriqueños. A pesar de que la Libre Asociación es la única opción política que experimenta el mayor margen de crecimiento electoral desde 1998, se han creado conceptos erróneos que el Partido Nuevo Progresista y el Partido Popular Democrático usan como puntos de propaganda y que no tienen fundamento científico ni en la experiencia de los Estados Unidos con sus repúblicas asociadas del Pacífico, a saber, Palau, Micronesia e Islas Marshalls. Los siguientes puntos de desinformación son las falacias más comunes promovidas por el PNP y el PPD. Procederé a desmitificar, de forma muy resumida, cada uno de estos puntos:
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Libre Asociación es Independencia: Falso
La Libre Asociación es un estatus político distinto y separado de la independencia, especialmente en referencia a las relaciones exteriores y la defensa. La Libre Asociación fue creada por la Resolución 1541 de la Asamblea General (GA) de las Naciones Unidas (ONU) que estableció que la integración, la independencia y la libre asociación son opciones descolonizadoras. La resolución no establece que la Libre Asociación sea independencia o un tipo de independencia. La Libre Asociación y la Independencia son dos tipos de soberanía a los que cualquier nación puede aspirar. Simplemente explicado, naciones independientes como España, Colombia, Nigeria o Pakistán nunca cederían a Estados Unidos aspectos importantes de su soberanía nacional, como la defensa y la seguridad nacional.
La Libre Asociación pondrá fin a la ciudadanía estadounidense de los puertorriqueños: parcialmente cierto, pero los privilegios continuarán.
Aquellos que son ciudadanos estadounidenses en el momento de la proclamación del Pacto de Libre Asociación seguirán siendo ciudadanos estadounidenses, y sus hijos tendrán derecho a la ciudadanía estadounidense por sangre. En cuanto a las generaciones futuras, se trata de una cuestión de negociación, ya que la Libre Asociación es un proceso de negociación que se ajusta a la coyuntura particular del momento. Cada persona nacida en Puerto Rico después de la llegada de fa será un ciudadano puertorriqueño. Lo que los puertorriqueños atesoran, el libre tránsito a los EE.UU. sin límites, la libertad de trabajar, estudiar, disfrutar de programas federales y permanecer sin restricciones continuará bajo la Libre Asociación. Precisamente, este fue el marco migratorio acordado entre los EE.UU. y sus Repúblicas Asociadas del Pacifico en la forma de un concepto legal llamado “residente habitual”.
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La Libre Asociación pondrá fin a los fondos federales que recibe Puerto Rico: Falso
El alcance y el tamaño de los programas federales es una cuestión de negociación, pero la asistencia federal estadounidense continuará garantizando una transición exitosa hacia la soberanía que dará herramientas para desarrollar el país. ¿Por qué EE.UU. mantendría esa asistencia? Para dar espacio a los puertorriqueños para que forjen, establezcan y construyan una economía productiva, competitiva e interdependiente. De acuerdo con los Pactos de Libre Asociación entre Estados Unidos, Islas Marshall,Palau y Micronesia, la ayuda federal en diversos temas continuará, incluso si uno de los países propone cambiar aspectos clave del pacto o retirarse del mismo.
Puerto Rico necesita ser independiente primero antes de firmar el Pacto de Libre Asociación: Falso
Puerto Rico puede hacer la transición del estatus territorial actual a la Libre Asociación sin la necesidad de ser independiente primero. Durante las negociaciones entre Estados Unidos, Islas Marshall y Palau, algunas de las islas solicitaron independizarse antes de negociar la Libre Asociación. Estados Unidos no lo permitió, ya que desafiaba los intereses geopolíticos estadounidenses del momento e imponía un proceso demasiado de largo.
EE.UU. puede poner fin al pacto de Libre Asociación unilateralmente: Cierto
Pero Puerto Rico también puede poner fin a la relación unilateralmente. Así es como funciona la Libre Asociación. Se hace de esta manera para proteger a Puerto Rico y mostrar al mundo que es una relación soberana genuina y voluntaria, y que no es otra imposición. Incluso, si una retirada unilateral ocurre después de un referéndum libre y abierto, los Pactos de Libre Asociación con las Repúblicas Asociadas al Pacífico establecen claramente que la ayuda federal y la asistencia humanitaria continuarán. La retirada unilateral es altamente improbable, ya que la motivación geopolítica de Estados Unidos para establecer el pacto de Libre Asociación es muy difícil que cambie de forma dramática.
La Libre Asociación es para países pequeños con poca población: Falso
En la Resolución 1541 mencionada anteriormente no se establecen tales criterios, por lo que es una opción para cualquier pueblo que quiera refundar su relación con otra nación. La norma del derecho internacional a la libre determinación no estipula requisitos o estándares al respecto. La Libre Asociación es un proceso en el que las partes negocian lo que quieran y crean un modelo que se ajuste a sus realidades. Recuerden que la extensión territorial en términos geopolíticos es relativa: las Repúblicas Asociadas del Pacífico no son para nada pequeñas si se toma en cuenta su mar territorial, su zona económica exclusiva y las organizaciones internacionales subregionales de las que forman parte. En términos geopolíticos (proyección de poder global), ni las Repúblicas Asociadas del Pacifico ni Puerto Rico son poca cosa.
