La defensa de los recursos naturales y el medio ambiente fueron parte de mis esfuerzos legislativos durante todo este cuatrienio. Radiqué diversas medidas legislativas y colaboré con diversos sectores y grupos para denunciar y fiscalizar a agencias gubernamentales que, con acciones u omisiones y su entrega a intereses económicos poderosos, mutilan nuestro entorno natural, nuestras costas, conservación de terrenos y otros tantos.
Ejemplos de dicha legislación, son los proyectos de Ley de Costas, la prohibición de los depósitos de cenizas de carbón, la preservación mediante ley de reservas naturales y el proyecto de prohibición del uso del “foam” en el comercio. Fiscalizaciones: las actuaciones de la Junta de Planificación con relación al plan de uso de terrenos y la pérdida de reservas naturales.
Tenemos en agenda legislativa una nueva actuación del gobierno en la que, en medio de las elecciones y a espaldas del pueblo, el Departamento de Recursos Naturales y Ambientales (DRNA) aprobó una orden administrativa que elimina requisitos ambientales y permitiría impactar adversamente a comunidades y áreas naturales y agrícolas de alto valor ecológico.
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Esta Orden amplía el listado de “exclusiones categóricas” que no requieren documentos de impacto ambiental permitiendo así, que acciones y proyectos que afectan al medioambiente, puedan evadir una evaluación ambiental rigurosa sin una razón meritoria. Esto se aprobó sin previa notificación pública, excluyendo de su evaluación a la ciudadanía.
Las nuevas exclusiones categóricas dejan sin efecto los requisitos para las solicitudes de variación en uso, cambio de calificación o una consulta de ubicación, evaluación de concesiones y autorizaciones para el aprovechamiento de los bienes de dominio público que no requieran una obra de construcción lo que, en consecuencia, pudiera permitir excavaciones, extracciones, remociones o dragados en bienes de dominio público como son las cuencas hidrográficas y los componentes de la corteza terrestre en la zona costera.
Con esta nueva orden administrativa el DRNA traiciona una vez más al pueblo y a su función ministerial de proteger el medioambiente y otorga un cheque en blanco a ciertos intereses inescrupulosos cuya sensibilidad para con el medioambiente siempre ha sido nula. Esto será parte de nuestra agenda legislativa durante el próximo cuatrienio.