No nos sorprende que el PNP siga intentando robarse las elecciones: nos robaron vidas, suministros, fondos de recuperación, la educación, salarios, pensiones y la salud. Lo que sí nos sorprende es que un sector de los rojos se siga comportando como los azules y sigan las tácticas usurpadoras de Pierluisi al autoproclamarse alcaldes, como Miguel Romero y presidentes de los cuerpos legislativos, como lo sigue haciendo ese sector del PPD. La todavía gobernadora, no electa, sin vergüenza alguna les recibió como funcionarios electos certificados, así, frente a los ojos del mundo, en un intento burdo de normalizar el fraude.
Todas las personas lo vimos, lo anticipamos desde el desastre de las primarias, frente a nuestros ojos comenzaron las máquinas a sufrir desperfectos -cuando antes al evento todas habían sido debidamente calibradas y certificadas- las máquinas dejaron de leer todas las papeletas; le arrebataron papeletas a electores; obligaron a electores a dejar sus papeletas en cajas y lo peor de todo: cuando la página de la CEE cayó y no se podían acceder los resultados, el equipo de Pierluisi se dirigió al pueblo de Puerto Rico con unos alegados números que le proclamaban ganador, a los que sólo ellas tenían acceso.
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Sin lugar a dudas, el evidente descontento del pueblo con las políticas antidemocráticas, antipueblo y corruptas del bipartidismo sacó a relucir lo peor de un sistema electoral corroído y putrefacto. Es decir, que si antes no me sentía representada por esos sectores, ahora me avergüenza su existencia. Es inaceptable que no se hayan contado todos los votos, que personas fallecidas aparezcan votando, que veamos fotografías de candidatos votando con papeletas duplicadas; que sigan apareciendo maletines y que se hayan perdido múltiples tarjetas de las máquinas. Esto es inaceptable pero lo podemos cambiar. Tenemos que continuar denunciando, fiscalizando y protestando hasta que tengamos un resultado que respete la expresión democrática de este pueblo.
Cerca de 36,000 personas me honraron con sus votos en el Distrito 1 -según los resultados preliminares- colocando al MVC en un histórico segundo lugar en la capital de Puerto Rico. Les aseguro que seguiremos fiscalizando y denunciado los actos de corrupción y fraude. Me llena de esperanza el cambio que se siente y que se demostró en estas elecciones, nuestro pueblo seguirá luchando incansablemente por su bienestar. Otro Puerto Rico es posible y lo vamos a seguir construyendo.