Durante varias semanas hemos denunciado distintos actos de negligencias y corrupción, así como legislación que atenta contra los derechos humanos por parte del gobierno de Puerto Rico. Dichas denuncias son importantes y tenemos la obligación de continuar fiscalizando e informando al país sobre todos estos actos, muchos de ellos indignantes y que provocan nuestro más fuerte rechazo.
Por otro lado, tenemos a mucha gente haciendo cosas positivas, trabajando, luchando y haciendo patria. Durante toda esta cuarentena hemos visto como han surgido decenas de empresas que se dedican a llevar a miles de hogares, productos cosechados por agricultores puertorriqueños, aportando a la maltrecha economía y sirviéndole a la gente. Ante la realidad del hambre que están pasando muchas familias, la solidaridad hace presencia una vez más, la gente donando vivieres, dinero y muchas voluntarias y voluntarios sirviendo y llevando un plato caliente de comida.
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Muchos comerciantes reinventándose, panaderías y cafeterías continúan trabajando para dar servicio y seguir participando del comercio. Los laboratorios Clínicos y las farmacias de la comunidad continúan siendo eslabones importantes en el maltrecho sistema de salud y brindando servicio de primera necesidad para muchas personas con diversos problemas de salud.
Ver a través de las redes sociales a artistas, músicos y gestores culturales, llevando su arte y su conocimiento gratuito al público, para aliviar el “espíritu“ y animar a la gente ante tantos problemas emocionales que provoca este encierro y distanciamiento.
De igual forma ver todos los días a tantos profesionales de la salud salir a luchar contra este terrible enfermedad, en muchas ocasiones en condiciones laborables deplorables, son otro ejemplo de hacer patria, como también los han hecho miles de maestras y maestros enseñando a distancia a sus estudiantes, para cumplir con su vocación de educar la niñez.
De igual forma no podemos abstraernos de la realidad de muchos trabajadores que han perdido su empleos, de comerciantes y profesionales que han tenido que cerrar negocios y oficinas, tenemos que seguir luchando y fiscalizando para su regreso al proceso productivo.
Con toda esta gente, que continúa aportando desde distintos espacios y proyectos, es que vamos a levantarnos y recuperarnos de esta emergencia. El resultado inequívoco e ineludible de esta gesta, nos llevará a estar mucho más cerca de poder reconstruir una patria nueva.
