En momentos en que el periodismo digital se está tragando el periodismo tradicional, las redacciones periodísticas tendrán que tomar medidas drásticas para poder competir. Si no se invierte en innovación, en cuestión de meses o unos pocos años desaparecerán. Así de drástico es el asunto. Muchos periódicos que han sido el marco de referencia en los salones de clase por su estilo tradicional decidieron centrarse en esa página de innovación en lugar de ignorar el llamamiento a modernizar la marca. Incluso fueron más arriesgados que las estaciones de televisión. La empresa de la imagen continúa buscando las maneras para competir en inmediatez, pero ha languidecido porque los espectadores prefieren las redes sociales y las empresas productoras de contenido especializado. La televisión ha dejado de dictaminar la pauta de los restantes medios de comunicación. Ahora son las redes sociales las que deciden la agenda.
¿Cómo, entonces, puede prevalecer un medio de comunicación pequeño ante lo que parecería ser un monstruo digital? En una visita a una emisora de radio AM, posicionada en la zona sur del país como una de las más activas y con mayor credibilidad, me compartieron su receta: no le decimos no al regionalismo, conocemos nuestro público y lo valoramos, hacemos preguntas con respeto para resolver los problemas que les aquejan a los ciudadanos, no permitimos gritos ni faltas de respeto en las ondas sonoras, hacemos encuestas con nuestro público, capitalizamos en las redes y les contestamos a los radioescuchas, fomentamos la colaboración ciudadana y la sustentabilidad. Es decir, defienden y le dan exposición a lo suyo con el contenido que amerita en la zona y siguen las normas éticas. Me llamó la atención que los espacios todavía pertenecen a los periodistas con estupendas entrevistas y no a fotutos comunicadores. Mientras que en San Juan todos compiten por una misma noticia, la pequeña emisora familiar se centra en buscar la exclusiva con una entrevista profunda. Más tarde esa reacción del entrevistado, como dicen por ahí, revienta en la zona metro. En cuanto a las redes sociales, han sabido y son tan rápidos como el pensamiento, la palabra y los dedos le permitan. Así que con su estrategia han conseguido subsistir y darles trabajo a los de esa zona, procurando la excelencia y evitando la mediocridad. La innovación llegó a tiempo, y, si lo revalúan, no se trata de dólares y centavos, sino más bien de compromiso, estrategia y pensamiento. ¿Estarán a tiempo los otros medios de comunicación pequeños para montarse en la ola de la innovación?
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Trabajar en una redacción pequeña es arduo porque tienen menos recursos, pero precisamente por ello pueden tener la capacidad para involucrar a su público en el periodismo ciudadano. Conocer al público ayuda a tomar las decisiones adecuadas para complacer gustos e identificar contenido viable. La presencia en las redes sociales es fundamental. Quizá buscar a un experto en esas lides sea el primer paso para poder seducir al público. Fomente otros estilos y la colaboración ciudadana para poder construir relaciones a largo plazo con el público. Hay que liberar el contenido del aspecto tradicional y educar al público con otros formatos. A los anunciantes hay que enseñarles las nuevas oportunidades comerciales e involucrarlos en la innovación.
Si se fijan, cultivar el contenido inteligente y procurar ideas brillantes para cautivar al público es la receta. No es posible vivir en un mundo cada vez más digital solo con herramientas y soportes periodísticos de otra época. El primer paso es apostar a la innovación de la organización periodística e ir por temas nuevos, explicarlos con verticalidad y despertar la curiosidad del lector y espectador.
Por eso la batalla cultural obliga a repensar modelos periodísticos y publicitarios, aun los más exitosos, para intentar ganarla. Hoy mis estudiantes de seminario concluyen con su trabajo periodístico innovador dedicado al periodismo sustentable, etnográfico y el de marca. ¿Qué dijeron cuando le aposté a ello? No tuvieron miedo porque saben que con esa fórmula podrán desarrollar su estilo informativo con respeto y tendrán mayor oportunidad de trabajo. Ojo al dato: la mayoría se dedicará al emprendimiento.
