Más de 60 años después de su asesinato, quizás haya justicia para Emmett Till, aunque quienes lo mataron ya no están vivos.
Las autoridades en Estados Unidos han reabierto la investigación sobre el brutal linchamiento de Till, un afroestadounidense de 14 años que fue víctima en 1955 de uno de los episodios de racismo más polémicos en la historia moderna de ese país.
PUBLICIDAD
Según dijo este viernes el Departamento de Justicia, se recibió "información nueva" sobre el caso, que podría esclarecer la muerte del joven, cuyo cuerpo en descomposición fue hallado en el río Tallahatchie (Misisipi), días después de que fuera secuestrado y asesinado.
En aquel momento, los responsables del asesinato -Roy Bryant y su medio hermano J.W. Milam- fueron absueltos por un jurado compuesto solo por personas blancas, lo cual se cree contribuyó a que los dos hombres fueran exonerados.
El trágico final de Emmett tuvo que ver con supuestas insinuaciones sexuales que realizó a Carolyn Donham, una mujer blanca de Money (Misisipi).
Pero al parecer Donham desmintió su propia versión de los hechos durante una entrevista en 2008.
Sus declaraciones aparecen en el libro "La sangre de Emmett Till" (Timothy Tyson, 2017) y en ellas la mujer confiesa que todo lo que dijo sobre el joven durante el juicio "no fue enteramente cierto".
PUBLICIDAD
Muchos consideran que la revisión del caso tiene que ver con las reveladoras confesiones de Donham, aunque las autoridades no lo confirmaron.
La prensa no ha logrado entrevistar a la mujer, aunque se sabe que está viva y a sus 83 años reside en Carolina del Norte.
Por un "piropo"
Emmett Till —originario de Chicago— había ido de visita al pueblo rural de Money, donde vivían familiares suyos.
Antes del viaje su madre le advirtió sobre el sesgo racial que había en esa época en los estados del sur.
El 24 de agosto de 1955 el joven visitó una tienda del pueblo, donde vio a la cajera Carolyn Donham.
Lo que pasó entre ellos no está claro, pero cuando Roy Bryant —esposo de la dependienta y dueño de la tienda— regresó al negocio, le dijeron que el adolescente había piropeado a su mujer.
Cuatro días después fue con su medio hermano J.W. Milama a la casa donde Emmett se quedaba.
Ambos lo metieron a la fuerza en un auto y lo llevaron a un río donde le golpearon, le dispararon en la cabeza y le echaron al agua. Fue hallado sin vida tres días más tarde.
Milam confirmó esta versión años después, durante una entrevista con la revista Look, y dijo que Bryant y él lo habían hecho porque Emmett se había propasado con una mujer blanca que además era la esposa de su pariente.
Cambios sociales
Mamie Bradley —madre de Emmett Till— decidió que el ataúd de su hijo iba a permanecer abierto durante el funeral.
Las imágenes del rostro de Emmett eran perturbadoras.
Y eso era exactamente lo que quería transmitir Bradley: un retrato de la violencia racial contra los afroestadounidenses.
En Chicago, a donde fue trasladado el cuerpo del joven para su enterramiento, cientos de personas se congregaron para despedirlo.
Al caso de Emmett le sucedieron otros hitos en la historia de la lucha contra la segregación racial en EE.UU.
Quizás el más notable fue el de Rosa Park, una mujer negra que en 1955 decidió ocupar un asiento de autobús "solo para blancos" en Alabama.
Cuando un hombre blanco le reclamó el asiento, Parks se negó a cederlo. Por esa razón fue arrestada y multada con US$14.
Este episodio desencadenó fuertes protestas que contribuyeron a derrumbar leyes racistas que segregaban a los negros.
Sin resultados concretos
El caso de Emmett quedó sin resolver.
En 2004 se reabrió y el FBI exhumó el cuerpo del joven en 2005, pero no hubo resultados concretos.
En ese momento los funcionarios dijeron que había pasado demasiado tiempo.
En 2007 el caso se remitió al fiscal del estado del cuarto Distrito Judicial de Misisipi, pero un gran jurado se negó a emitir nuevos cargos, según The Washington Post.
En 2008 el entonces presidente, George W. Bush, firmó una ley que llevaba el nombre de Emmett Till y que tenía como objetivo permitir la reapertura de las pesquisas sobre atentados contra los derechos civiles, sin importar cuántos años hubieran pasado.
La norma, cuya vigencia fue extendida indefinidamente por el presidente Barack Obama en 2016, podría ayudar a que se esclarezca este caso.
Ahora puedes recibir notificaciones de BBC News Mundo. Descarga la nueva versión de nuestra app y actívalas para no perderte nuestro mejor contenido.