El senador independentista Juan M. Dalmau Ramírez radicó el 6 de febrero una medida para ordenar al Negociado de la Policía no colaborar con cualquier entidad federal que se dedique a la investigación o prosecución de aquellos que practiquen peleas de gallo.
“En ninguna de las tres instancias en las cuales las peleas de gallos han sido prohibidas en Puerto Rico hemos tenido voz y voto. En el 1776, fueron prohibidas por un gobernador español no electo, sino impuesto; en el 1898, fueron prohibidas por el gobierno norteamericano luego de su invasión a la Isla y en el 2018, fueron prohibidas por el Congreso”, repasó el Senador.
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“En el reclamo de nuestros derechos democráticos, y desde la intervención ilícita de nuestra soberanía político-cultural, las ramas electas del Gobierno de Puerto Rico determinan ordenar al Negociado de la Policía (…) que no colaboren con (…) entidad federal alguna que se dedique a la investigación y/o prosecución de individuos que contravengan la prohibición de las peleas de gallos extendida a Puerto Rico”, lee la resolución conjunta del Senado 351.
“Debe quedar meridianamente claro que el Gobierno de Puerto Rico rechaza la imposición de la prohibición de las peleas de gallos en Puerto Rico por parte del Congreso de los Estados Unidos”, establecería la medida, que hasta el momento no ha sido referida a ninguna comisión para su evaluación.
El gobernador Ricardo Rosselló Nevares ha repetido en varias ocasiones que “Puerto Rico es una jurisdicción de ley y orden” y, por consiguiente, las autoridades estatales intervendrán en estos casos.
Sin embargo, los municipios de San Juan y Mayagüez han aprobado ordenanzas para que la policía municipal no intervenga. Del mismo modo, la Asociación de Alcaldes ha convocado manifestaciones en contra de la prohibición.
