En los próximos días, el Proyecto de la Cámara 3, que enmienda la Ley de Reforma Laboral y revierte algunas medidas, pasará al escritorio del Gobernador, Pedro Pierluisi Urrutia. El proyecto fue ampliamente discutido con la academia, diversas organizaciones sociales, económicas y gubernamentales para poder darle un debido trámite legislativo. Este proceso se dio de esa manera para poder subsanar el atropello que ocasionó el trámite para poder convertir en ley la mal llamada reforma laboral (Ley 4-2017).
En términos procesales, el Proyecto de la Cámara 3 fue considerado con desprendimiento y objetividad para poder entender el contexto social y económico del país. Tomando en consideración ambas variables, tuvimos diálogo en la Asamblea Legislativa para poder plasmar en el documento la diversidad de aspiraciones. En ese proceso, hubo delegaciones que optaron por el todo o nada y dejaron a un lado formar parte de la delegación que estableció como prioridad adelantar la agenda laboral restituyendo derechos y ampliando en algunas disposiciones.
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El eje central de la aspiración de la aprobación del proyecto es mejorar las condiciones laborales en el país y poder brindar justicia a los trabajadores y trabajadoras del sector privado que son pieza fundamental para mover el país. Reconociendo que actualmente existe un gobierno compartido, el cual exige que todos los sectores establezcan sus prioridades para poder procurar consenso. El Proyecto de la Cámara 3, cumple con ese objetivo, ya que fue ampliamente discutido con distintas delegaciones y miembros del gabinete que tienen inherencia en materia laboral y de desarrollo económico.
Son ampliamente discutidas las disposiciones del Proyecto de la Cámara 3 que adelantan la agenda de los miles de trabajadores y trabajadoras del sector privado en Puerto Rico. Por esa razón, exhorto al Gobernador a que reivindique los derechos y las condiciones laborales en Puerto Rico firmando el proyecto. Reconozco a quienes se han unido al esfuerzo de promover el desarrollo de los empleados y empleadas para incentivar que permanezcan en la isla formando parte del motor del país.
¡Gobernador, los miles de trabajadores y trabajadoras de Puerto Rico exigen que hagamos causa común para hacerles justicia!
