El profesor y catedrático Rubén Berríos Martínez destacó el lunes los vínculos históricos de su familia con la Universidad de Puerto Rico al participar en la actividad organizada por la Escuela de Derecho con motivo de su jubilación.
Al expresar su agradecimiento a la institución, sostuvo que su relación con la Universidad comenzó mucho antes de su nacimiento. “Hoy vengo aquí, antes que nada, a agradecerle a la Universidad de Puerto Rico lo mucho que le debo”, dijo Berríos Martínez, al mencionar que varias generaciones de su familia han estudiado en el sistema universitario.
Al repasar su trayectoria docente, recordó cómo llegó a integrarse a la Facultad. “Desde la segunda mitad de la década de los años 60 hasta el presente, he tenido el privilegio de ejercer como profesor en esta Facultad de Derecho, salvo por mis 16 años como senador y varios semestres como candidato a gobernador”, expresó.
Berríos Martínez relató enseñanzas que marcaron su desarrollo académico y político, e incluyó palabras que recibió en un momento difícil. “No te preocupes Rubén, sigue adelante que en esta vida lo importante no son las flores, lo importante son los amores”, dijo, citando al exrector Abraham Díaz González.
También mencionó el efecto que tuvieron sus estudiantes y colegas en sus convicciones.
“Agradezco además las innumerables enseñanzas de compañeros y compañeras de la Facultad y de mis estudiantes de las más diversas ideologías que, con sus interrogantes y observaciones, fortalecieron mi profunda convicción de que la patria libre y justa debe ser de todos y para todos”, indicó.
Al recordar los obstáculos enfrentados en su carrera universitaria y política, describió el periodo en que fue separado de su puesto tras una acción de desobediencia civil.
“Por allá a principios de los años 70… los directivos de esta facultad y del Recinto de Río Piedras me despidieron como profesor”, expresó, recitando versos de Martí que dijo haber internalizado en ese momento: “Cultivo una rosa blanca… cardo ni ortiga cultivo; cultivo una rosa blanca”.
Berríos Martínez incluyó reflexiones sobre la lucha política y la firmeza de ideales. “Lección aprendida: mantente firme en tus convicciones no importa las consecuencias. A final de cuentas vale más el respeto que la comodidad y el beneficio propio”, afirmó.
Al presentar sus ideas sobre el futuro político del país, insistió en la necesidad de promover un proceso de descolonización. “Hoy, en el 2025 todavía estoy y estaré luchando por la libertad y la justicia social de mi patria. Porque hoy todavía estamos en la colonia”, manifestó al reafirmar su postura.
Reiteró su propuesta para adelantar ese proceso mediante un organismo electo por el pueblo. “Para descolonizarnos se impone convocar aquí en Puerto Rico una Asamblea de Estatus o Constituyente… en donde elijamos representantes de las diversas alternativas no coloniales ni territoriales”, señaló.
Berríos Martínez concluyó su mensaje con un llamado a la acción inspirado en su maestro Gilberto Concepción de Gracia. “A la lucha y a la victoria”, expresó.