El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció el jueves en la noche una serie de medidas migratorias más estrictas, horas después de que se confirmara el fallecimiento de Sarah Beckstrom, una integrante de la Guardia Nacional herida en un tiroteo ocurrido el miércoles cerca de la Casa Blanca.
En publicaciones en Truth Social, Trump aseguró que ordenará “pausar permanentemente la migración desde todos los países del Tercer Mundo”, sin precisar cuáles naciones entrarían en esa categoría. Según el mandatario, la suspensión permitiría que “el sistema estadounidense se recupere completamente”.
Las expresiones surgieron luego de que el presidente confirmara la muerte de Beckstrom, de 20 años, asesinada presuntamente por Ramanulá Lakanwal, un ciudadano afgano de 29 años que entró a Estados Unidos en 2021 con permiso humanitario. Su compañero, Andrew Wolfe, de 24 años, permanece en condición crítica.
El caso ha reavivado el discurso migratorio de Trump, quien además prometió cancelar beneficios y subsidios federales para “todo no ciudadano”, revocar admisiones aprobadas durante la administración Biden e iniciar procesos de deportación contra quienes considere “una carga pública, riesgo de seguridad o incompatibles con la civilización occidental”.
El presidente también indicó que buscará “desnaturalizar a migrantes que socaven la tranquilidad doméstica”, una expresión que generó fuerte reacción en redes sociales y círculos legales por su vaguedad y posibles implicaciones constitucionales.
Las autoridades federales confirmaron que Lakanwal ingresó al país bajo la operación Aliados Bienvenidos, destinada a apoyar a afganos vulnerables tras la retirada estadounidense de Afganistán. Aunque llegó bajo la administración Biden, su solicitud de asilo fue aprobada posteriormente durante el gobierno actual.