El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, aseguró que “hagan lo que hagan, no van a poder con Venezuela”, ante la escalada de tensiones con Estados Unidos acentuada por la designación por parte de Washington del Cártel de los Soles como organización terrorista extranjera, y ante el despliegue militar norteamericano en el mar Caribe.
“Hagan lo que hagan, cómo lo hagan, dónde lo hagan, no van a poder con Venezuela. Somos invencibles”, ha asegurado el mandatario en su programa en la cadena estatal VTV, donde ha denunciado “amenazas, guerras psicológicas, políticas (y) diplomáticas”.
Con todo, Maduro ha insistido en el mantenimiento de la paz: “Seguirá siendo nuestra victoria, lograda a pulso por nuestros propios esfuerzos”, ha declarado.
Sus declaraciones llegaron en la víspera de la llegada a Trinidad y Tobago del jefe del Estado mayor estadounidense, Dan Caine, apenas 24 horas tras la designación del Cártel de los Soles --cuya dirección atribuye Washington a Maduro y otros altos cargos-- y menos de una semana después de que concluyeran los ejercicios militares conjuntos entre marines y tropas trinitenses en el mar Caribe.
La Administración de Donald Trump, que ha autorizado a la CIA a operar en Venezuela, ha esgrimido el presunto rol del Cártel de los Soles en el tráfico de drogas como una de sus principales bazas para justificar ataques contra supuestas narcolanchas en aguas del Caribe, aunque también los ha extendido al Pacífico oriental, sumando al menos 83 muertos en 21 operaciones en total.
Con todo, y pese a que Maduro no se ha referido al grupo en su intervención, el ministro de Exteriores venezolano, Yván Gil, ha reaccionado al anuncio de Washington sobre la organización, que ha calificado de “inexistente”, como una “ridícula patraña” para justificar una “intervención ilegítima” en el país.
Existe disparidad de opiniones acerca de la existencia o no de esta supuesta organización del narcotráfico, que según algunos expertos carece de jerarquía y no pasaría de una red de corrupción conformada por políticos y altos cargos de las Fuerzas Armadas venezolanas que se beneficiarían de acuerdos puntuales con grupos del narcotráfico.

