La Cooperativa La Sagrada Familia (CSF) anunció el martes desde la Fundación Sila María Calderón la creación de un fondo de inversión comunitaria de $1 millón, el primero de este tipo dentro del sector cooperativista en Puerto Rico, como parte de un esfuerzo para convertir a las comunidades en motores de desarrollo económico.
La iniciativa llega acompañada del lanzamiento de Puerto Rico Coopera, un proyecto multisectorial que aspira a atender necesidades sociales, promover el emprendimiento y fomentar oportunidades de crecimiento en municipios con altos niveles de vulnerabilidad.
El anuncio fue realizado por Eddie W. Alicea Sáez, presidente ejecutivo de CSF, quien destacó que el objetivo es “unir fuerzas para cambiar realidades y devolver esperanza a nuestras comunidades más vulnerables”. El proyecto se implementará inicialmente en Barranquitas, Naranjito, Corozal, Comerío y Orocovis, que en conjunto concentran cerca de 133,000 habitantes.
El Oasis de Naranjito como eje del proyecto
Como parte del esfuerzo, CSF pondrá a disposición el centro de resiliencia comunitaria El Oasis Sagrada Familia, construido mediante una inversión de $1.25 millones, elevando la aportación total a $2.25 millones en capital e infraestructura.
El Oasis —ubicado en un predio de cinco cuerdas y certificado como “HUB Macro” por el Negociado de Manejo de Emergencias— cuenta con pozo de agua, sistema solar, cocina comunitaria, salones de reunión y espacios para actividades. Hasta ahora ha servido como punto de apoyo tras emergencias naturales, y ahora funcionará también como centro permanente de desarrollo comunitario para los municipios de la montaña.
Amplia alianza multisectorial
Más de diez organizaciones y entidades ya han expresado interés en sumarse a Puerto Rico Coopera, entre ellas Cáritas de Puerto Rico, Pro-Techos, Para la Naturaleza y la Fundación Sila M. Calderón, así como líderes comunitarios y funcionarios municipales. El Oasis se convertirá además en espacio satélite para los grupos colaboradores.
La implementación del proyecto contará con el apoyo del llamado “ejército comunitario” de la cooperativa, compuesto por sus 94 empleados y más de 50,000 socios, quienes aportarán horas de voluntariado para impulsar iniciativas locales.
Fundada hace 66 años, CSF ha destinado en la última década más de $3 millones a proyectos sociales y comunitarios. Entre sus esfuerzos se incluyen ferias de salud, apoyo tras el huracán María, iniciativas educativas, culturales y deportivas, y la incubación de pequeños negocios.
“Lo que hemos hecho hasta hoy ha sido solo el comienzo. Con Puerto Rico Coopera damos un paso firme hacia un futuro que facilite que las comunidades tengan las herramientas y la energía para levantarse con fuerza y dignidad”, afirmó Alicea.

