El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se pronunció este sábado tras una serie de ataques armados perpetrados contra dos congresistas estatales en sus residencias ubicadas en Champlin y Brooklyn Park, al norte de Minneapolis.
Trump condenó la violencia y lamentó los fallecimientos.
“Me han informado sobre el terrible tiroteo ocurrido en Minnesota, que parece ser un ataque dirigido contra legisladores estatales (...) están investigando la situación”, escribió en sus redes sociales el presidente.
Los asesinato ocurrieron en el norte de Estados Unidos, y el Buró Federal de Investigaciones (FBI) ya se encuentra realizando las investigaciones pertinentes.
Por otro lado, el presidente mencionó que esta violencia “no será tolerada”, debido a sus implicaciones políticas y radicales.
“Una violencia tan horrible no será tolerada en los Estados Unidos de América. ¡Que Dios bendiga a la gran gente de Minnesota, un lugar verdaderamente maravilloso!“, concluyó el mandatario.
Por su parte, el gobernador de Minnesota, Tim Walz, calificó los hechos como un acto de “violencia política” y condenó enérgicamente el atentado, subrayando que las diferencias no deben resolverse mediante la violencia.
¿Qué sucedió?
La representante estatal Melissa Hortman fue asesinada junto a su esposo, mientras que el senador John Hoffman junto con su esposa resultaron gravemente heridos. Hortman, abogada y madre de dos hijos, fue una destacada líder demócrata, y expresidenta de la Cámara de Representantes.
Mientras, Hoffman, también demócrata, fue electo en 2012 y dirige una consultoría. Tanto él como su esposa fueron sometidos a cirugía tras recibir múltiples disparos; las autoridades informaron que su recuperación era prometedora.
El principal sospechoso, quien vestía un uniforme policial, habría utilizado esa apariencia para acceder a las viviendas. Aunque el móvil exacto no fue confirmado, las investigaciones apuntaron a posibles motivaciones políticas.