Justo al inicio de la temporada de huracanes los meteorólogos mantienen bajo observación un área de baja presión con potencial de desarrollo.
El Centro Nacional de Huracanes (NHC) localizó el disturbio frente a a costa sureste de Estados Unidos.
“Una zona de baja presión no tropical se prevé que se forme en los próximos dos a tres días cerca o frente a la costa sureste de Estados Unidos. Aunque las probabilidades de desarrollo son bajas, si el sistema permanece sobre el océano, podría adquirir gradualmente características subtropicales o tropicales mientras se desplaza hacia el noreste a una velocidad de entre 10 y 15 millas por hora”, lee el informe del CNH.
Los expertos dijeron que la probabilidad de formación en las próximas 48 horas es cercana al 0 %, y a siete días, se mantiene baja, en un 10 %.
La temporada de huracanes dio inicio ayer domingo y se extiende hasta el 30 de diciembre.
Los pronósticos auguran una temporada más activa de los normal durante la cuál se pueden formar hasta 19 sistemas con nombre y hasta cinco huracanes de categoría mayor.
De acuerdo con la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA), las condiciones atmosféricas y oceánicas se están alineando para propiciar un aumento considerable en la formación de ciclones tropicales.
El pronóstico tiene un 60% de probabilidad de que la temporada sea “por encima de lo normal”, lo que representa una de las proyecciones más agresivas de la última década.
NOAA atribuye este aumento a varios factores clave: temperaturas oceánicas más cálidas de lo habitual en el Atlántico tropical, condiciones neutrales o La Niña en desarrollo (lo que reduce los vientos que normalmente inhiben la formación de huracanes), y una intensificación esperada del monzón en África Occidental, que suele estar vinculada a una mayor actividad ciclónica.