Las autoridades forenses de Inglaterra revelan esta semana nuevas evidencias en la investigación sobre la muerte de Imogen Nunn, una joven creadora de contenido de 25 años, quien falleció en 2023.
Según el Tribunal Forense de West Sussex, la paciente alertó a una enfermera sobre la compra de una sustancia tóxica por internet con intención de autolesionarse. Aunque la profesional de salud informó a la policía, no se ejecutan acciones de seguimiento.
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El informe indica que no se activaron los protocolos establecidos para casos de riesgo, lo que expone deficiencias en la coordinación interinstitucional.
Autoridades médicas reconocen fallas
La Sussex Partnership NHS Foundation Trust, institución encargada del cuidado de Nunn, emitió un comunicado en redes sociales en el que ofrece disculpas por no haber garantizado “una atención de calidad constante”. Además, admitió que la planificación de atención, gestión de riesgos y comunicación entre organismos del NHS no fue adecuada.
Tras la muerte de Nunn, la institución indicó que actualizó sus procesos de evaluación, documentación clínica y auditoría interna, incluyendo mejoras en los planes de atención y seguimiento.
Familia solicita mayor responsabilidad institucional
Louise Nunn, madre de la joven, declaró que su hija había solicitado ayuda y que hubo múltiples oportunidades para intervenir. El caso se convierte en un ejemplo de fallos en la atención de salud mental en jóvenes, situación que vuelve a poner en discusión las políticas de prevención en el sistema sanitario británico.
Imogen Nunn había informado sobre sus problemas de salud mental desde los 13 años y realizaba búsquedas en internet relacionadas con el suicidio días antes de su fallecimiento.
Sí usted o alguien que conoce está pasando por una crisis emocional, puede llamar a la Línea PAS de ASSMCA al 9-8-8 o al 1-800-981-0023. También, pueden usar la modalidad de chat en https://lineapas.assmca.pr.gov/.
