ATLANTA (AP) — Una persona en Texas ha sido diagnosticada con gripe aviar, una infección relacionada con el descubrimiento reciente del virus en vacas lecheras, dijeron funcionarios de salud el lunes.
El paciente está siendo tratado con un fármaco antiviral y su único síntoma reportado era enrojecimiento ocular, señalaron autoridades sanitarias de Texas. Los funcionarios dicen que la persona había estado en contacto con vacas que se presume estaban infectadas, y el riesgo para el público sigue siendo bajo.
PUBLICIDAD
Representa el primer ejemplo conocido a nivel global de una persona que se contagie de este tipo de gripe aviar a partir de un mamífero, dijeron funcionarios federales de salud.
Sn embargo, no hay evidencia de propagación de persona a persona ni de que nadie se haya infectado a partir de leche o carne de ganado, dijo el doctor Nirav Shah, subdirector principal de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés). Los exámenes genéticos no dejan entrever que el virus se esté diseminando con mayor facilidad ni que esté causando enfermedades más graves, señaló Shah. Y las medicinas antivirales actuales todavía parecen ser eficaces, añadió.
La semana pasada se reportó que vacas lecheras en Texas y Kansas estaban infectadas de gripe aviar, y posteriormente funcionarios federales de agricultura confirmaron que había infecciones en una manada lechera de Michigan que recientemente había recibido vacas de Texas. Ninguna de las vacas afectadas ha fallecido, dijo Shah.
Desde 2020, un virus de la gripe aviar ha estado propagándose entre más especies animales —incluidos perros, gatos, zorrillos, osos e incluso focas y marsopas— en muchos países. Sin embargo, su detección en ganado estadounidense es un “giro inesperado y problemático”, dijo el doctor Ali Khan, exinvestigador de brotes de los CDC que ahora es decano de la facultad de salud pública de la Universidad de Nebraska.
Esta gripe aviar fue identificada por primera vez como una amenaza a la salud pública durante un brote en Hong Kong en 1997.