Los compradores que buscan grandes ofertas abarrotaron los centros comerciales y las tiendas el viernes, ya que los minoristas aumentaron los descuentos del Black Friday para atraer a los clientes que este año se ajustan a presupuestos más estrictos y se resisten a las compras impulsivas.
Los consumidores se ven presionados por la disminución de sus ahorros y el aumento de la deuda de sus tarjetas de crédito. Aunque han obtenido cierto alivio de una inflación moderada, muchos productos y servicios, como la carne y el alquiler, siguen siendo mucho más caros que hace tres años.
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Yvonne Carey, de 72 años, fue una de las primeras compradoras de la tienda Macy’s de Herald Square, en Manhattan, donde adquirió calzado Michael Kors y Ugg con rebajas. Pero Carey dijo que planea ceñirse al mismo presupuesto de 1.000 dólares del año pasado mientras compra regalos para sus seis nietos y su marido.
“Los precios son una locura en todo, comida, ropa”, dijo Carey.
Muchos minoristas encargaron menos productos para esta temporada y adelantaron las ventas de fin de año en comparación con el año pasado para ayudar a los compradores a repartir su gasto. La tendencia a adelantar las compras se aceleró durante la pandemia, cuando los atascos en la cadena de suministro en 2021 hicieron que la gente comprara antes. Pero este año, los minoristas dijeron que más compradores se centran en las ofertas y esperan hasta el último minuto.
En la tienda Macy’s de Herald Square, los compradores empezaron a entrar en masa poco después de que se abrieran las puertas a las 6 de la mañana, encontrando descuentos de entre el 40% y el 50% en botas, zapatos y bolsos. La joyería de diamantes estaba rebajada un 60%.
Frente a la competencia de viajes y restaurantes, Macy’s intensificó esta temporada las compras experienciales. En Herald Square, la tienda de Princesas Disney contaba con un sistema de realidad aumentada que permitía a las más jóvenes meterse virtualmente en uno de los vestidos de princesa.
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“El cliente está bajo presión. Lo vemos en el sector del lujo. Es algo reciente”, declaró Jeff Gennette, director general de Macy’s, en una entrevista con The Associated Press, y añadió que los compradores de todos los niveles de renta son “más exigentes a la hora de gastar su presupuesto”.
Alrededor de 12,000 clientes estaban en el Mall of America de Bloomington, Minnesota, en la primera hora de apertura, a las 7 de la mañana, un 20% más que el año pasado, según Jill Renslow, vicepresidenta ejecutiva de desarrollo de negocios y marketing del centro comercial.
Según ella, los descuentos están más o menos en línea con los de hace un año, y espera que las ventas aumenten entre un 3% y un 4% en el centro comercial.
Atrás han quedado los Viernes Negros de hace años, cuando los clientes hacían fila durante horas en plena noche o se producían peleas por artículos muy codiciados. Aun así, las compras del Black Friday siguen siendo una tradición muy apreciada por muchos.
“Me encanta hacerlo. Me paso toda la noche en vela esperando este día”, comentó Lisa Brooks, de 45 años, una enfermera del Bronx que estaba en Macy’s desde temprano buscando perfumes, calcetines y otros artículos para ella y su madre.
