LIMA (AP) — El posible rostro en vida de la momia más famosa de Perú, una adolescente inca sacrificada en un ritual hace más de 500 años en la cima de los Andes, fue presentado el martes por un equipo de arqueólogos polacos y peruanos que trabajaron junto a un escultor sueco especializado en reconstrucciones faciales.
“Pensé que nunca sabría cómo era la cara de ella cuando estaba viva”, dijo el antropólogo estadounidense Johan Reinhard, descubridor de “Juanita” o la “Doncella Inca de Hielo”, como la conocen, en una ceremonia realizada en el Museo Santuarios Andinos de la Universidad Católica de Santa María, en Arequipa.
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Se presentó en el acto un busto de la momia que Reinhard halló en 1995 a más de 6.000 metros de altitud en el volcán nevado Ampato.
“Ahora 28 años después, esto se ha hecho realidad gracias a la reconstrucción de Oscar Nilsson”, dijo Reinhard, quien ha descubierto más de 14 sacrificios humanos incas en zonas altas de los Andes, incluidos tres niños en una fosa helada del volcán Llullaillaco, en Argentina. El antropólogo observó el busto elaborado con silicona de la joven de típicos pómulos pronunciados, ojos negros y piel bronceada.
Nilsson, arqueólogo y escultor sueco especializado en reconstrucciones faciales en 3D de humanos antiguos, comentó por correo a The Associated Press que le tomó “unas 400 horas de trabajo” modelar el rostro de la más famosa momia peruana.
Dagmara Socha, bioarqueóloga polaca del Centro de Estudios Andinos de la Universidad de Varsovia, indicó en la ceremonia que el primer paso para lograr el rostro de Juanita fue “obtener una réplica del cráneo”.
En un comunicado, la Universidad Católica Santa María añadió que también se usaron “tomografías del cuerpo, estudios de ADN, características etnológicas, edad, complexión”, junto a técnicas forenses, en especial el método de reconstrucción facial de Manchester, el más utilizado en la actualidad.
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De acuerdo con los estudios antropológicos, Juanita fue sacrificada entre 1440 y 1450 después de Cristo, cuando tenía entre 13 y 15 años. Medía 1,40 metro de estatura, pesaba 35 kilos y estaba bien nutrida.
Al año siguiente de ser descubierta fue trasladada a Estados Unidos para ser estudiada y exhibida en la sede del National Geographic Society, en Washington, a cuya ceremonia inaugural asistieron el entonces presidente peruano Alberto Fujimori y la entonces primera dama estadounidense Hillary Rodham Clinton.
La probable causa de su muerte fue un fuerte golpe en el occipital derecho porque se halló una hemorragia intercraneal luego que investigadores de la Universidad Johns Hopkins le realizaron una tomografía computarizada. También se detectó, tras realizarle punciones en el estómago, que horas antes de su muerte había consumido vegetales.
A través de esos datos se conoció que practicó dos actividades que se conservan hasta la actualidad en los Andes: el mascado de hojas de coca y la ingestión de una bebida fermentada de maíz.
Reinhard considera que los niños, incluida Juanita, fueron sacrificados porque hubo sequías y erupciones volcánicas.
“Se produjeron catástrofes naturales, que impulsaron a los sacerdotes a calmar a sus dioses con niños criados en condiciones de pureza, para aplacar su ira”, dijo el antropólogo al sitio de internet de la Universidad Católica Santa María.
El nevado Ampato y otros de la cadena montañosa de los Andes eran dioses importantes para los Incas debido a que en sus cimas se formaban los glaciares y de ellos nacían los ríos que irrigaban los campos de cultivo que permitían la agricultura y los alimentos.
El antropólogo estadounidense comentó que a lo largo de los años los científicos han estado investigando aspectos de la vida de Juanita, como por ejemplo la dieta y los objetos encontrados junto a ella. “Estos hallazgos nos han ayudado a comprender mejor su vida y la cultura Inca, ahora podemos ver cómo se veía realmente, lo que la hace aun más viva”.