MADRID, 17 (EUROPA PRESS) El Papa Francisco ha instado este domingo a abordar los fenómenos migratorios como “algo esencial para el futuro de todos”, por lo que merece una respuesta construida “sobre la fraternidad, teniendo en cuenta la vida humana, las personas concretas y sus necesidades”.
Así lo ha expuesto el Pontífice al acabar el Ángelus en la plaza de San Pedro del Vaticano, cuando ha recordado el viaje que realizará el próximo viernes, 22 de septiembre, a la ciudad francesa de Marsella para asistir a la clausura de la tercera edición de los 'Encuentros del Mediterráneo'. Está previsto que sea el presidente de Francia, Emmanuel Macron, sea quien reciba oficialmente al Papa.
PUBLICIDAD
Francisco se ha referido a este evento como una iniciativa que sirve para "promover caminos de paz, colaboración e integración, con especial atención en el fenómeno migratorio".
Así, ha incidido en que este "representa un desafío que no es fácil", como se ve en las noticias de estos días, ha dicho, en referencia a la llegada de miles de migrantes a la isla de Lampedusa, en Italia. Se trata de algo que "hay que afrontar juntos", ha insistido.
El Pontífice, que también ha reclamado seguir rezando por el "atormentado pueblo ucraniano" y la "paz en todas las tierras ensangrentadas por la guerra", ha centrado su reflexión del Ángelus en la misericordia de Dios.
"El mensaje de Jesús es claro: Dios perdona de modo incalculable, excediendo toda medida. Él es así, actúa por amor y gratuidad. Nosotros no podemos corresponderle, pero cuando perdonamos al hermano o a la hermana, lo imitamos. Por lo tanto, perdonar no es una buena acción que se puede hacer o no hacer, es una condición fundamental para quien es cristiano", ha subrayado.
“El perdón es el oxígeno que purifica el aire contaminado por el odio, es el antídoto que cura de los venenos del rencor, es la vía para desactivar la ira y curar tantas enfermedades del corazón que contaminan la sociedad”, ha añadido, para instar a “cada uno” a “pensar en una persona que nos ha herido” y “perdonarla”. “Nos hará bien y devolverá la paz a nuestro corazón”, ha destacado.