Mientras el Departamento de Educación (DE) analiza la posibilidad de ajustar los horarios de clases en los planteles del sistema público de escuelas, entre otras medidas, para soportar las constantes olas de calor que se registran, un grupo de representantes del Partido Popular Democrático (PPD) considera que no se están analizando soluciones con la premura necesaria y emplazó tanto a la secretaria interina del DE, Yanira Raíces Vega, como al gobernador, Pedro Pierluisi, a tomar medidas inmediatas.
El grupo de representantes, liderado por el presidente de ese colectivo político, Jesús Manuel Ortiz, señaló que en medio de la ola de calor que experimenta el archipiélago, el gobierno arrastra los pies para ofrecerle los servicios básicos de educación a los niños y jóvenes del país.
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Asimismo, denunciaron que a pesar de los miles de millones de dólares recibidos en fondos federales, la administración del gobernador no ha sabido administrarlos efectivamente.
“Ante este cuadro, el gobierno de Pedro Pierluisi no puede decir que no tienen los fondos para las escuelas. En el pasado las excusas estaban siempre centradas en la falta de fondos, hoy no tienen esa excusa”, indicó el presidente de la pava.
“(El gobierno) está en un marasmo y un estancamiento sin precedentes. Lo dice la propia comisionada residente, quien señaló la falta de ejecución de fondos federales en sus ataques contra el gobernador ante una posible primaria. Los proyectos no avanzan y no se vislumbra la voluntad del gobierno para mejorar la calidad de vida de los niños y jóvenes de Puerto Rico”, añadió.
Ortiz destacó que los fondos CDBG_DR que Puerto Rico recibió para la reconstrucción luego del paso de los huracanes Irma y María vencen en 2026 y aseguró que la lentitud y burocracia de la administración Pierluisi han obligado al gobierno a pedir una extensión de esos fondos hasta 2029.
“A eso le llamamos ineficiencia e ineptitud en el descargue de sus funciones a pesar de tener una asignación de fondos federales nunca antes vista”, dijo el también legislador.
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Esta semana el DE anunció, sin embargo, que completó una evaluación sobre las condiciones de infraestructura en las 856 escuelas públicas y, al momento, la secretaria designada evalúa los resultados con miras a agilizar las acciones que mitiguen el impacto de las altas temperaturas en los salones de clases.
Por su parte, el representante del Distrito 23 – que cubre los municipios de Peñuelas, Guayanilla y Yauco – José “Cheito” Rivera Madera, aseguró que el problema de los planteles escolares del sistema público de enseñanza se extiende más allá de su distrito, cuyas escuelas fueron afectadas durante los terremotos de 2020, y se ha convertido en un problema de toda la isla.
“Ese problema de las escuelas no es exclusivo de mi distrito, se extrapola por todo Puerto Rico cuando la incapacidad del gobierno se manifiesta en que ni tan siquiera saben distribuir dinero federal, en no crear las estructuras necesarias para hacerlo”, denunció el legislador de La Pava.
“A esta incompetencia se le une las altas temperaturas que inciden en el aprovechamiento académico de nuestros estudiantes. A sabiendas de los estragos del calentamiento global, el DE no ha preparado efectivamente las escuelas para esto. Sabemos de escuelas sin ventanas, sin abanicos”, añadió.
El representante enfatizó en que algunos fondos federales asignados desde 2020 al DE tienen fecha de caducidad para este año y otros para 2024.
“Es inexcusable que no se haya utilizado el 47 por ciento de la ayuda federal asignada a la segunda fase del Fondo de Ayuda de Emergencia para las Escuelas Primarias y Secundarias (ESSER, en inglés), de no usarse ese dinero tiene que devolverse este próximo 30 de septiembre”, indicó Rivera Madera quien lamentó que el gobierno tenga que devolver fondos que en estos instantes los estudiantes necesitan con urgencia para mitigar los estragos del calentamiento global.
“De una asignación de $1,300 millones en fondos federales solo se han gastado $694 millones y se tuvieron que devolver $23 millones en la primera fase. La tercera fase está en riesgo con solo el 20.6 por ciento de los fondos utilizados de una asignación de casi $3,000 millones. La administración ha demostrado incompetencia y una falta de compromiso”, añadió.
Entre las opciones y medidas planteadas por el DE para mitigar el problema están la organización en horario alterno de las escuelas sin acondicionadores de aire ni ventilación adecuada, el establecimiento de oasis en las escuelas, fuentes de agua fría y dotar a cada salón con una estación de agua fresca. También, termómetros en cada salón para monitorear la temperatura, la reducción de la cantidad de alumnos por salón, la instalación de nuevos acondicionadores de aire, la adecuación de las canchas, la atención prioritaria a los alumnos del Programa de Educación Especial garantizando la temperatura adecuada y el tiempo lectivo así como el equipo y personal necesario, entre otras.
Sin educación en línea
El Frente Amplio en Defensa de la Educación Pública (FADEP), denunció a través de un comunicado de prensa, sin embargo, que dentro de las opciones presentadas por el DE no se incluyen la de la educación en línea.
La misiva también denuncia la falta de interés del gobierno por implementar la educación con conciencia sobre el cambio climático y los estragos que este produce.
“A medio y largo plazo, establecimos claramente la urgencia de revisar los currículos para educar sobre la defensa y conservación del ambiente así como la educación sobre el cambio climático para combatir sus causas y revertir el proceso de calentamiento, programas de reforestación en las escuelas y en todo el país, adoptar medidas como los techos verdes, energía solar u otras fuentes de energía renovable”, indica el comunicado.
“Como medidas de seguimiento, planteamos la necesidad de establecer una línea de tiempo especificando la fecha en que se atenderá el problema por escuela utilizando los fondos ESSER para costear las unidades de aire, equipos relacionados y su mantenimiento, establecer una mesa de diálogo que incluya al FADEP y al DR. Pablo Méndez (especialista en cambio climático) para trabajar en conjunto y dar seguimiento al plan de acción y a los planteamientos hechos”, añade.