SANTIAGO (AP) — Intensas lluvias en el centro y sur de Chile aumentaron peligrosamente el viernes el caudal de varios ríos que amenazan con desbordarse, provocaron el corte parcial de carreteras y obligaron a evacuaciones preventivas en diversos puntos del país.
Chile vive la peor sequía desde hace 14 años y las lluvias y sus efectos en las últimas jornadas son las más intensas desde 1993, según las autoridades.
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En la capital chilena, unos cinco millones de personas se quedarán sin agua potable después del mediodía del sábado, anunció la ministra del Interior, Carolina Tohá. El corte afectará a 34 de las 52 comunas del gran Santiago.
El corte del suministro ocurrirá por el agotamiento de los estanques de reserva de aguas de emergencia, que duran 37 horas. La empresa productora del líquido paralizó el jueves sus plantas debido a la gran turbiedad de los dos ríos, el Mapocho y el Maipo, que la abastecen.
Las lluvias causadas por un frente de mal tiempo se iniciaron el viernes y se prolongarán hasta el sábado. “En un día y medio llovió todo lo que llovió el año pasado”, comparó el gobernador de Santiago, Claudio Orrego.
Innumerables localidades han sufrido ya inundaciones parciales debido a la acumulación de aguas lluvias y al desbordamiento de riachuelos. Numerosas viviendas fueron afectadas, especialmente las construidas sin autorización en las orillas de las corrientes de agua.
En el sur, en la región de O’Higgins, se informó del desbordamiento parcial en varios sectores de los ríos Cachapoal, Claro y Tinguiririca y, en sectores de la región del Maule, se ordenó una evacuación preventiva de residentes debido a la amenaza de desbordamiento del río Ancoa. La situación se repite en otras localidades por la amenaza que representa para los puentes el gran caudal de los ríos.
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En Talagante, a 50 kilómetros al sur oeste de la capital chilena, el desbordamiento del río Maipo atrapó a cuatro personas que debieron ser rescatadas por aire desde el techo de un automóvil sobre el que se refugiaron. La localidad precordillerana de San José de Maipo, a unos 45 kilómetros al sureste de Santiago, ha sufrido inundaciones y cortes de su carretera principal. En la capital chilena hay también varias comunas sin energía eléctrica.
En la cordillera de la Región Metropolitana, donde se ubica Santiago, ha llovido en zonas donde normalmente cae nieve, lo que puede ocasionar que las precipitaciones remuevan masas sólidas de ramas, piedras y tierra, entre otros elementos, lo que puede afectar a localidades más abajo.
Decenas de miles de personas se aprestan a salir de Santiago ante un fin de semana largo porque el lunes es feriado. La mayoría viaja a balnearios de la cercana costa del Pacífico, aunque la principal carretera usada como ruta ha sufrido cortes temporales de tránsito ante el incremento del caudal del río Mapocho, que amenaza un puente por el que se debe cruzar obligatoriamente.