Un nuevo estudio arrojó que las muertes por armas de fuego en Estados Unidos alcanzaron un récord en 2021. En él, se explica que las principales víctimas fueron niños y adultos jóvenes.
Publicado por la Universidad Johns Hopkins, el estudio anual toma los datos de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) e informó que 48,830 estadounidenses se quedaron sin vida a causa de armas de fuego en 2021.
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Se contabilizó que, según US Gun Violence, hubo una muerte por arma de fuego cada 11 minutos en 2021. En estudio se halló que hubo “26.328 suicidios con armas de fuego y 20.958 homicidios. La tasa de suicidios con armas representó un aumento del 8,3% desde 2020, el mayor aumento anual en más de cuatro décadas”, reseña NPR.org.
Entre 2019 y 2021, los homicidios por armas aumentaron un 45 por ciento y la tasa de homicidios se elevó hasta un siete por ciento. Asimismo, a la misma vez que aumentaron los suicidios por armas de fuego un 10% también disminuyó a ocho por ciento los suicidios cuando se realizan por otros medios.
“Las armas están impulsando este aumento”, dice Ari Davis, autor principal del estudio. “Creo que, de alguna manera, eso no es sorprendente, porque hemos visto grandes aumentos en la compra de armas. Hemos visto que una gran cantidad de estados hacen que sea mucho más fácil portar un arma en público, portarla oculta y comprar un arma sin tener que pasar por algunos de los procesos de investigación que tienen otros estados”.
Por otro lado, hay otros datos que son verdaderamente alarmantes. De 2019 a 2021, aumentó un 49% para los afroamericanos y un 44% para los hispanos/latinos muertos por armas de fuego en tiroteos.