Tres personas sufrieron heridas leves luego de que un dron se estrelló contra un edificio residencial en una ciudad del suroeste de Rusia próxima a Ucrania, reportó el viernes un gobernador. El incidente expuso la vulnerabilidad de los sistemas de defensa aérea del país a medida que la guerra de su presidente, Vladímir Putin, en Ucrania tiene cada vez más repercusión en suelo ruso.
Este es el último ataque con drones contra ciudades rusas en las últimas semanas y coincide con la intensificación de los esfuerzos de Ucrania para expulsar a las tropas del Kremlin de la vasta franja de territorio que ocuparon en el sur y el este tras la invasión que comenzó hace más de 15 meses.
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En una publicación en Telegram, el gobernador regional Alexander Gusev explicó que los residentes fueron alcanzados por fragmentos de vidrios de las ventanas rotas en el inmueble de la ciudad de Voronezh y fueron atendidos en el lugar. Los medios estatales rusos publicaron imágenes que mostraban un bloque de apartamentos alto con algunas ventanas reventadas y daños en parte de su fachada.
Según Gusev, el objetivo del dron era una base aérea próxima, pero se desvió luego de que su señal fuese interceptada electrónicamente. La ciudad está a unos 250 kilómetros (155 millas) al norte de la región oriental ucraniana de Luhansk, ocupada en su mayoría por Rusia.
Además, Vyacheslav Gladkov, goberndor de la vecina región de Belgorod, también fronteriza con Ucrania, dijo en Telegram que las defensas antiaéreas estuvieron funcionando toda la noche y que un edificio de apartamentos y varias viviendas privadas sufrieron daños. El mandatario indicó que dos objetivos no especificados fueron alcanzados, pero no dio más detalles acerca de la causa de los daños.
Estos incidentes con aviones no tripulados — que ya han alcanzado zonas residenciales en Krasnodar, en el sur, y llegaron al Kremlin — y las incursiones transfronterizas en el suroeste de Rusia han revelado brechas evidentes en las defensas aéreas de Moscú y su porosa seguridad fronteriza.
Las autoridades ucranianas acostumbran a negar su participación en este tipo de ataques.
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Por otra parte, la web de la presidencia ucraniana publicó el viernes una declaración en vídeo de Volodymyr Zelenskyy en la que el mandatario alude a los últimos esfuerzos de las fuerzas de Kiev para expulsar a los invasores rusos en varias zonas de los más de 1.000 kilómetros (620 millas) de la línea del frente.
En lo que parecía ser un video selfie en el interior de un vagón de tren tras visitar la región del sur del país afectada por las inundaciones, Zelenskyy indicó que estaba en contacto con las tropas ucranianas “en todas las zonas más candentes” de los guerra y elogió un “resultado” no especificado por sus esfuerzos.
Las autoridades ucranianas suelen guardar silencio sobre sus últimos movimientos militares, negándose a unirse a los crecientes comentarios de expertos militares occidentales y otros acerca de la puesta en marcha de su esperada contraofensiva.
Zelenskyy se hizo eco de esa postura gubernamental el viernes al afirmar que aún “no es el momento” de hablar sobre los detalles de los combates.
Tanto los analistas como los informes rusos sugieren que las fuerzas ucranianas han estado activas en torno a la ciudad de Bájmut, que quedó devastada en gran medida luego de un sangriento enfrentamiento de un mes, y realizan operaciones de sondeo en las inmediaciones de zonas ocupadas por Rusia en las provincias de Donetsk y Zaporiyia.
El gobernador de la región de Jersón, Oleksandr Prokudin, reportó el viernes que el nivel del agua bajó alrededor de 20 centímetros (unas 8 pulgadas) durante la noche en la orilla occidental del río Dniéper, anegada desde el martes debido a la rotura de la represa de Kajovka, ubicada más arriba en el cauce. La parte baja del río discurre a lo largo de la línea del frente.
De acuerdo con las cifras ofrecidas por funcionarios de ambos bandos, unas 16 personas perdieron la vida debido a la crecida, que ha añadido más miseria a las vidas de los ucranianos ya asfixiados por la guerra.
Viktor Vitovetskyi, representante del Servicio de Emergencias de Ucrania, indicó que se inundaron 46 municipios de la región, 14 de ellos en el margen oriental, ocupado por Rusia.
A pesar de los esfuerzos para rescatar a civiles y llevar agua potable, asistencia médica y otros servicios, en el último día, los bombardeos rusos mataron a dos civiles e hirieron a 17 en la zona, añadió Prokudin.
En todo el país, al menos 4 civiles fallecieron y 41 personas más resultaron heridas en las últimas 24 horas, dijo la oficina de Zelenskyy.
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Kozlowska informó desde Londres. Los periodistas de The Associated Press Jon Gambrell en Kiev, Ucrania, y Hanna Arhirova en Varsovia, Polonia, contribuyeron a este despacho.