La Inteligencia Artificial no solo está avanzando en espacios de ilustraciones, videos o textos: en la guerra también lo hace. El Pentágono, Departamento de Defensa de Estados Unidos, está consciente de la rapidez en la innovación, por lo que actualizó su directiva de armas automatizadas por primera vez en más de una década.
Su objetivo: guiar el desarrollo de nuevos sistemas de defensa y ataque.
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Michael Horowitz, jefe de Política de Capacidades Emergentes del Pentágono, presentó la Autonomía en los sistemas de armas, la directiva actualizada.
Los avances en materia de armas e Inteligencia Artificial
De 2012, año de publicación de la última guía sobre Inteligencia Artificial, a 2023, fueron muchos los hallazgos en el campo.
La evolución del sistema de drones, el uso de armas automáticas y el desarrollo de armas que puedan desactivar los drones enemigos son parte importante de lo logrado en la última década, y muchos de estos avances han podido presenciarse en la Guerra en Ucrania.
Recordemos que Estados Unidos y las potencias europeas han abastecido de armas al gobierno de Volodímir Zelenski, en la defensa de Ucrania frente al ataque de Rusia, iniciado el 24 de febrero de 2022.
La producción de armamento con Inteligencia Artificial busca perfeccionarse y seguir obteniendo alternativas cada vez mejores.
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“La directiva no prohíbe el desarrollo de ningún sistema de armas en particular: establece los requisitos para los sistemas de armas autónomos y semiautónomos”, destacó Horowitz.
Se mantiene el juicio humano al momento de utilizar el armamento con IA
Una de las cosas más importantes es “la visión dramática y ampliada del papel de la Inteligencia Artificial en futuras operaciones militares”, agregó el ejecutivo.
No obstante, en algo están claros los integrantes del Pentágono: los comandantes y operadores deben ejercer un juicio humano apropiado sobre el uso de la fuerza. La recopilación de información y ejecución se deja a las armas, pero la orden procede de una persona.
“La directiva no cambia los requisitos de aprobación”, subraya Horowitz. “Todavía tiene revisores de alto nivel, que finalmente están haciendo la llamada en estos sistemas. Lo que hace el grupo de trabajo de armas autónomas es facilitar la agregación de la información que los líderes superiores necesitarían para poder tomar decisiones de manera efectiva”.