San Juan P.R- El Ombudsman de Puerto Rico, Edwin García Feliciano, exhortó a los puertorriqueños a encontrar en esta Navidad, la voluntad para reafirmar los valores cristianos que definen nuestra personalidad individual y colectiva, con el servicio al prójimo, la defensa de la familia y la contribución de cada talento para el futuro de la Isla.
García Feliciano señaló que, en esta Navidad, cada puertorriqueño debe hacer una introspección para ofrecer al servicio de Puerto Rico, sus mejores auspicios, desde sus propias perspectivas y circunstancias personales.
PUBLICIDAD
Al describir este momento histórico como una encrucijada en nuestras decisiones como pueblo, el Procurador del Ciudadano llamó a la conciencia colectiva para eliminar la violencia física, emocional y verbal.
Pidió forjar un frente común que permita a todos nuestros niños acceder a las mejores alternativas de desarrollo y superación.
Siendo la época navideña muy propicia para la niñez, el Ombudsman exhortó también a extender el calor familiar a tantos niños que viven en hogares sustitutos, o que pasan la época navideña en una instalación de salud.
“Mi exhortación navideña es que la paz se construye, respondiendo ante el pedido de auxilio, fraternidad y solidaridad de quien requiera nuestra ayuda”, manifestó.
Recordó el mensaje de cristiandad de nuestros fundamentos como sociedad, para ayudar al desvalido y al desposeído, denunciar y combatir las injusticias, y ser empáticos, inclusivos y comprensivos.
PUBLICIDAD
Llamó también el Procurador a evangelizar cada acto de nuestras vidas, con acciones concretas que permitan construir entendimiento, concordia y armonía.
Dijo García Feliciano que esta Navidad, en su ambiente festivo y pintoresco, debe servir para iluminar a todos los que tienen algún talento o disposición de servicio a la Isla, para que se unan a los cientos de instituciones o entidades altruistas que buscan tender la mano al hermano, ya que el futuro de Puerto Rico depende y se construye por todos los puertorriqueños.
“Que sea una Navidad sin accidentes, sin violencia y llena de profundo amor fraternal y convicción cristiana”, añadió el ombudsman Edwin García Feliciano.
