El expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, se ha desentendido de la asistencia de Nick Fuentes, acusado de antisemitismo, a una cena privada que el magnate organizó en su mansión de Mar-a-Lago, Florida, junto al rapero Kanye West, implicado a su vez en otra reciente polémica por comentarios ofensivos contra los judíos.
La Liga Antidifamación de Estados Unidos considera a Fuentes un “supremacista blanco”, quien ha llamado a combatir el “control de los judíos” y “negó, en broma” la existencia del Holocausto.
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Fuentes, a su vez, comparó a los judíos incinerados por los nazis con “galletas dentro de un horno”.
Trump confirmó la cena con West, quien supuestamente se ofreció para acompañar la candidatura presidencial del magnate como candidato a vicepresidente.
“Le dije que no debería presentarse a la Presidencia”, ha hecho saber Trump en un mensaje publicado en su red Truth Social. “Además, tampoco sabía quién era Nick Fuentes”, añadió.
Una declaración posterior de Trump recogida por CBS News reiteró que el rapero “llegó con un invitado al que no conocía y del que no sabía nada”.
Por su parte, el embajador de Trump en Israel durante su mandato, David Friedman, expresó en Twitter su indignación ante el evento.
“A mi amigo Donald Trump, eres mejor que esto. Incluso una visita social de un antisemita como Kanye West y escoria humana como Nick Fuentes es inaceptable. Le insto a qué repudie y relegue a estos tirados al basurero de la historia al que pertenecen”, escribió.