Jóvenes pacientes que requieren oxígeno de forma urgente y batallan por respirar se postran en camas de innumerables hospitales infantiles de todo el país. Así se han encendido las alarmas por el virus respiratorio sincitial, conocido como VRS.
A nivel mundial, el VRS incide sobre unos 64 millones de personas al año. Por ende, no resulta una patógeno nuevo; quienes se pueden ver más afectados son aquellos de más de 65 años y menos de edad, poseen probabilidades de requerir hospitalización rápidamente.
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El virus genera unas 160 000 muertes anualmente. Entre ellas, cerca de 100 000 niños de cinco años en todo el mundo. Se conoció que, para uso general, aún no existe ni ningún tratamiento. Tampoco, vacuna para la enfermedad.
¿Existen soluciones virus respiratorio sincitial?
Varios expertos informan que para la temporada de VRS de 2023 podría lanzarse una vacuna a tiempo; contra la patología cabe la posibilidad de aprobarse un tratamiento con anticuerpos monoclonales, a finales de año.
En los primeros seis meses de vida, un 69 % de eficacia tiene la vacuna de Pfizer, según dijo el 1 de noviembre. Por su parte, en los primeros 90 días de los recién nacidos posee un efecto positivo del 81 %. A finales de 2022 solicitará la aprobación de su protocolo de vacuna del VRS.
El director del programa de neumonía de la Fundación Bill, Keith Klugman, junto a la dama que financia la vacuna materna candidata de Pfizer, Melinda Gates, se refirió al respecto, reseñó National Geographic. “Esto podría suponer un enorme cambio a nivel mundial”.
VRS atenta contra bebés
La directora del Centro de Desarrollo de Vacunas y Salud Global de la Facultad de Medicina de la Universidad de Maryland, Kathleen Neuzil, señaló que antes de la aparición de la COVID-19 “el VRS era inequívocamente la causa más importante de enfermedades respiratorias graves (…)”.
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Acotó: “(…) en bebés y niños pequeños vulnerables porque sus vías respiratorias son estrechas: entre los niños menores de un año, el VRS es la principal causa de bronquiolitis, la inflamación de las vías respiratorias del pulmón”.
Enfocándose en su punto de vista, responsabiliza el brote mundial de la situación que ocurre hoy día. “Ha causado verdaderos estragos en la estacionalidad de nuestros virus respiratorios”.
