El representante novoprogresista Yazzer Morales rechazó hoy, miércoles, cualquier expansión del Sistema de Relleno Sanitario (SRS)-vertedero- de Toa Alta.
Morales, quien representa el Distrito #9 (Toa Alta y Bayamón), exigió, además, que el Municipio respete el pedido de orden de la Agencia de Protección Ambiental (EPA, por sus siglas en inglés) y el Departamento de Justicia federal para cerrar el SRS ante serios señalamientos de daños ambientales.
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“Basta ya; las comunidades cercanas al vertedero están cansadas de pedir, de exigir el cierre de esta facilidad y el Municipio insiste en dejarlo abierto. Ahora, quieren, de todas maneras, expandir el SRS para que reciba desperdicios sólidos de forma recurrente por unos10 años más. Eso no es aceptable, ni para las comunidades cercanas, ni para el resto de los residentes de Toa Alta, y ni para este servidor. Rechazamos cualquier intento de reabrir el vertedero y mucho menos de expandirlo”, destacó Morales.
Vecinos de las comunidades aledañas al SRS denunciaron que una petición de fondos que hiciera el Municipio al programa de Desarrollo Rural del Departamento de Agricultura federal está diseñada para rehabilitar el área del SRS y expandir las células para aumentar la capacidad de recibir desperdicios sólidos.
“No habrá expansión, no habrá más abusos contra las comunidades cercanas al vertedero”, añadió el legislador, quien adelantó que se encuentra evaluando la radicación de varios recursos legales en caso de que el Municipio insista en reabrir el vertedero.
El 9 de agosto, la EPA y Justicia federal enviaron un comunicado de prensa informando sobre la orden para el cierre del SRS en Toa Alta. ‘Esta orden de acuerdo provisional refleja los esfuerzos del gobierno para integrar la participación y el insumo de las comunidades que han sufrido demasiado tiempo debido a este vertedero mal administrado’, señaló la administradora regional de la EPA, Lisa García.
En julio de 2021 el Departamento de Justicia federal solicitó una orden judicial para cerrar el vertedero de Toa Alta.
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En abril de 2017 la EPA ordenó el cierre del SRS de Toa Alta por serias violaciones de leyes y regulaciones ambientales, tanto estatales como federales, entre las que se encuentran graves problemas con el sistema de recogida de lixiviados. El lixiviado es un líquido que se ha filtrado o se ha generado por descomposición de basura.
Además, el vertedero de Toa Alta se encuentra localizado en la parte superior del sistema acuífero de la costa norte de Puerto Rico, con un potencial abasto de agua potable.