Un perro de raza italiana propiedad de una pareja homosexual ha sido infectado con viruela de mono o viruela de simio, y es el primer caso reportado en el mundo de transmisión de un humano a su mascota.
Se especula que la pareja francesa estuvo involucrada en una relación no monógama y contrajo la viruela del mono o viruela del simio luego del contacto sexual con otros hombres.
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Una PCR confirma la enfermedad en el perro
Los hombres informaron que notaron pústulas en el estómago de su perro. Y una prueba de PCR confirmó más tarde que el animal había contraído el virus.
El perro había compartido una cama con los dos hombres y había lamido al menos a uno de ellos antes de lamerse a sí mismo, según la revista médica The Lancet
Ambos hombres, de 44 y 27 años, sufrían extensas úlceras y erupciones desde que se confirmaron sus casos en junio. 12 días después de que comenzaron los síntomas, el perro comenzó a mostrar signos de que había contraído la viruela del mono.
La pareja dijo que habían tenido cuidado de mantener a su perro aislado de otras mascotas o humanos desde el inicio de sus propios síntomas.
Las autoridades han dicho que las personas infectadas con el virus deben ponerse en cuarentena lejos de sus mascotas para reducir la transmisión.
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Primer caso de transmisión de humanos a mascotas
Este es el primer caso en el que un animal doméstico ha sido infectado con viruela del mono o viruela del simio.
“En los países endémicos, solo se ha descubierto que los animales salvajes (roedores y primates) portan el virus de la viruela del simio”, informó The Lancet “Sin embargo, la transmisión del virus de la viruela símica en perros de las praderas se ha descrito en los EE.UU. y en primates cautivos en Europa que estuvieron en contacto con animales infectados importados”.
La Organización Mundial de la Salud dijo que el reciente brote de viruela símica es una emergencia mundial. Casi 100 países han informado casos de viruela del simio este año, y una docena de muertes se han relacionado con el virus.
La viruela del simio se puede propagar a través del contacto personal cercano, incluido el contacto directo con la erupción, las costras o los fluidos corporales de la viruela del simio de alguien con el virus, o el contacto con telas u objetos usados por alguien con el virus.
