El secretario del Departamento de Educación, Eliezer Ramos Parés, aseguró que no hubo señales de un patrón de abuso contra una menor de 13 años, con autismo severo, que fue agredida sexualmente y quedó embarazada por su padrastro en Gurabo.
“Hemos podido dialogar con el componente escolar particularmente con la directora escolar, trabajadora social, maestros de educación especial de esta niña, su asistente de servicios quien estuvo acompañándola durante todo este semestre escolar, y la información que brindan es que no hubo señales en ningún momento de algún patrón de abuso, de algún patrón de maltrato, o que los llevara a pensar que estaba siendo victima de abuso sexual”, sostuvo el secretario de Educación en entrevista con Telenoticias.
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Carlos Soto Rivera, de 49 años, confesó la violación, que ocurrió desde que la niña tenía 10 años, este fin de semana y fue acusado por cargos de agresión sexual y maltrato de menores. Al no prestar una fianza de $300 mil, fue ingresado en prisión.
Asimismo, la madre de la niña, Ana Castro Deluc, de 41 años, fue acusada por negligencia e ingresada en prisión por no prestar la fianza de $500 mil.
Todo transcurrió cuando el padrastro y la madre llevaron a la menor a sala de emergencias por dolor abdominal y los médicos se percataron de que tenía más de 30 semanas de embarazo.
“Aparentemente mamá es una persona que está todo el tiempo en el plantel escolar, es la persona que lleva y busca a la niña, es la persona con contacto directo con el maestro, así que nunca hubo algo que dio señales de que algo estaba ocurriendo en este hogar”, mencionó Ramos Parés.
Añadió que, alegadamente, nadie se percató del embarazo de la menor debido a que el uniforme escolar es una sudadera holgada que no permitía ver cambios en el cuerpo.
El funcionario dijo también que la niña culminó su año escolar en mayo y su madre avisó a la escuela que no necesitaría servicios de año escolar extendido en verano por lo que regresaría a la escuela en agosto.
