VISBY, Suecia (AP) — Tener que defender Gotland de una invasión extranjera parecía una idea tan improbable para los gobernantes suecos de principios de siglo que desmilitarizaron la isla en el Mar Báltico.
Ahora, las fuerzas armadas han regresado y practican con tropas estadounidenses no sólo cómo defender la isla, donde viven 58.000 personas, sino cómo arrebatársela a un agresor extranjero.
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Los infantes de marina de Estados Unidos han realizado descensos aéreos y desembarcos anfibios en Gotland dentro de un ejercicio de la OTAN en el Mar Báltico.
Aunque las maniobras anuales BALTOPS no responden a una amenaza específica, la edición de este año se celebraba entre tensiones agravadas con Rusia tras su invasión de Ucrania. Participaban unos 7.000 militares y 45 barcos de 14 países de la OTAN, así como Suecia y Finlandia.
Pese a su condición no alineada, los dos países nórdicos han hecho ejercicios de forma habitual con miembros de la OTAN, y sus gobiernos decidieron tras la guerra de Ucrania pedir la inclusión en la alianza militar occidental.
“Me siento muy preparado. Quiero decir, hemos hecho un gran despliegue en Gotland y defenderemos Gotland”, dijo el coronel sueco Magnus Frykvall, comandante del regimiento de la isla, mientras se desplegaba material militar en la costa. “Tomar una isla defendida es una tarea muy difícil”.
Gotland, en una posición estratégica en el sur del Mar Báltico, ha registrado invasiones durante toda su historia, la más reciente en 1808, cuando fuerzas rusas la ocuparon brevemente.
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Pero después de que terminara la Guerra Fría, Suecia pensó que el riesgo de una agresión rusa era tan remoto que centró sus fuerzas armadas en operaciones de paz en el extranjero más que en la defensa territorial. El regimiento de Gotland se cerró en 2005 dentro de una reducción del ejército sueco.
La anexión rusa de la Península ucraniana de Crimea en 2014 hizo reconsiderar esta situación, y en 2018 se estableció un nuevo regimiento en Gotland. Ahora hay unos 400 soldados suecos destinados en la isla de forma permanente. Está previsto reforzar el contingente tras la invasión rusa de Ucrania.
La importancia estratégica de Gotland, un destino popular de vacaciones para los suecos, se interpreta a menudo en relación a los países bálticos de Estonia, Letonia y Lituania, que están especialmente preocupados por cualquier agresión rusa tras la invasión en Ucrania. Gotland se encuentra a unos 100 kilómetros (60 millas) del territorio continental sueco y a unos 160 kilómetros (100 millas) de la costa letona.
“La cuestión es que desde aquí, el suministro y el apoyo a los países bálticos es mucho más fácil o mucho más difícil dependiendo de quién controle la isla”, explicó a The Associated Press Mikael Norrby, académico de la Universidad de Uppsala.
Coincidiendo con las maniobras de la OTAN, la Flota Báltica rusa inició sus propios ejercicios esta semana. El servicio de prensa de la flora describió el martes las operaciones como un ejercicio planeado con antelación sobre “varios tipos de tareas de seguridad”, como localizar y destruir submarinos enemigos.
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Jan M. Olsen in Copenhague, Dinamarca, contribuyó a este despacho.
