Representantes del Partido Nuevo Progresista en conjunto con legisladores del Partido Popular Democrático presentaron un proyecto que busca identificar al menos una escuela en desuso por municipio para que se utilizada como refugio permanente en caso de emergencia.
Los autores del Proyecto de la Cámara 1269 son Carlos Méndez, Sol Y. Higgins Cuadrado, Jesús Santa Rodríguez, Ángel Peña Ramírez, Ángel Bulerín Ramos y José Varela.
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“Entendemos que es del mayor interés público contar con refugios en cada uno de los 78 municipios que permitan una estadía prolongada para quienes perdieron sus hogares en caso de un huracán o terremoto, sin que esto entorpezca el retorno de estudiantes a las escuelas. Asimismo, es vital contar con refugios especializados en cada una de las zonas de la Isla, según la División de Zonas del Negociado para el Manejo de Emergencias y Administración de Desastres, para las familias donde al menos uno de sus miembros requiera de atenciones médicas. Esta medida va dirigida a este fin”, destacó Méndez.
“Este proyecto es uno de varios que han surgido luego de diversas conversaciones entre nuestros alcaldes, legisladores y jefes de agencia sobre las necesidades de los municipios en caso del impacto de un huracán como sucedió en septiembre de 2017 con Irma y María”, agregó el Portavoz novoprogresista.
El proyecto ordena a los secretarios de los departamentos de la Vivienda y Educación evaluar las escuelas públicas identificadas en desuso por el Departamento de Educación, según la Ley 124-2015 (Ley Especial de Identificación de Escuelas en Desuso), a los fines de designar al menos una escuela en desuso por municipio para que sirva como refugio en caso de emergencia o desastre; designar al menos una escuela en desuso por zona, según la División de Zonas del Negociado para el Manejo de Emergencias y Administración de Desastres, para que sirva de refugio para familias que al menos uno de sus miembros requiera de atenciones médicas o de salud especiales.
“Condicionar estos planteles en desuso y tenerlos disponibles en caso de una emergencia no solo ofrecerá seguridad a los ciudadanos vulnerables, sino que el uso de estas instalaciones evitará se interrumpa el periodo lectivo de nuestros estudiantes o su retorno a clases”, culminó diciendo.
La medida surge luego de una serie de reuniones entre un grupo de alcaldes y jefes de los departamentos de Seguridad Pública, Salud, Familia y Educación, al igual que con el Negociado para el Manejo de Emergencias y Administración de Desastres y la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados para atender los protocolos de respuesta rápida en caso del embate de un huracán o terremoto.
