Muchas veces la monarquía británica ha dado pasos en falso por querer hacer actos bondadosos. En esta oportunidad, el Príncipe William visitó, junto a su esposa Kate Middleton, el Centro Cultural Ucraniano en Londres, donde convivieron con voluntarios y aprendieron sobre los esfuerzos de ayuda humanitaria que ahí se llevan a cabo, pero William hizo un comentario que no fue bien recibido en las redes sociales.
Durante el encuentro de los Duques de Cambridge con los responsables del centro comunitario, el futuro rey dijo, “Para nuestra generación, es muy extraño ver esto en Europa”. Las redes sociales entonces respondieron a esto con indignación, interpretándolo como que lo “normal” es que haya guerra en otras partes del mundo.
PUBLICIDAD
Rápidamente, el príncipe se convirtió en trending topic en el Reino Unido –incluso existe el hashtag #PrinceWilliamisaracist–, y entre quienes se unieron a la conversación estuvo la hija de Martin Luther King, Bernice King. “Creo que hay mucho trabajo pendiente globalmente para erradicar lo que mi padre llamó los Tres Males: militarismo, el racismo y la pobreza”, comenzó. “Creo que el lenguaje importa en este trabajo. Y que es dañino que una figura global se exprese de la guerra como “extraña en Europa”, finalizó, refiriéndose al comentario del príncipe.
Por su parte, al Dra. Shola Mos-Shogbamimu, activista social británica, fue aún más enérgica. “El príncipe William lleva el racismo igual que lleva su retroceso en la línea capilar: visiblemente. De Meghan Markle a su comentario reciente con respecto a que la guerra es “extraña” en Europa, tiene mucho a qué responder”, acusó. “El príncipe William se debe disculpar por este comentario”, agregó.
Este comentario no le cae nada bien a la realeza británica, que se ve en el ojo de la crítica nuevamente con las sospechas que giran en torno a racismo dentro de la familia Windsor, que surgieron cuando el príncipe Harry y Meghan Markle señalaron en su entrevista a Oprah Winfrey que alguien dentro de la familia estaba “preocupado” por el color de piel de su hijo, Archie.