Klay Thompson impuso su mejor marca de la campaña con 33 puntos, incluidos 16 en el cuarto periodo, y los Warriors de Golden State aguantaron al final para superar el sábado 117-115 a los Lakers de Los Ángeles.
Stephen Curry logró una bandeja clave a 46 segundos del final, y Golden State estropeó otro hito de LeBron James.
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Curry finalizó con 24 tantos y ocho asistencias, mientras que Andrew Wiggins consiguió 19 unidades para que los Warriors cortaran una racha de dos derrotas. Golden State no ha sufrido tres tropiezos en fila en esta campaña.
La gran noche de Thompson llegó bajo la mirada de su padre, el exjugador de la NBA Mychal Thompson, quien trabaja en la transmisión de radio de los Lakers.
“Significó algo especial el logar esto por mi papá”, dijo Thompson. “Creo que no me había visto jugar en algunos años. Sé que está orgulloso de mí, y esto es siempre divertido”.
James terminó con 26 puntos, 15 rebotes y ocho asistencias, pero falló el primer tiro libre después de que Curry le cometió una falta cuando intentaba un triple a 2,4 segundos del bocinazo. El astro atinó el segundo disparo y falló el tercero de forma intencional, pero no pudo alcanzar el rebote a tiempo para intentar el disparo.
“Esto duele”, reconoció el entrenador de los Lakers, Frank Vogel. “Estábamos arriba por seis puntos con unos cuantos minutos por jugar. Fue simplemente uno de esos partidos en lo que las cosas malas le pasan a uno”.
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Antes, James había llegado a 22 partidos consecutivos anotando 25 puntos o más. Rebasó el récord de Kareem Abdul-Jabbar, al arribar a 44.157 puntos marcados, combinando la campaña regular y la postemporada.
James empató la marca de Abdul-Jabbar, de 44.149, en la primera mitad. La rebasó con un triple en los albores del tercer periodo.
“Tuvimos una oportunidad para ganar el partido esta noche”, consideró James. “Pero a lo largo de mi carrera, siempre que me mencionan junto a alguno de los grandes me quedo maravillado”.
