El primer ministro de la provincia canadiense de Ontario declaró el viernes estado de emergencia en respuesta a los bloqueos de camioneros en Ottawa y en la frontera entre Canadá y Estados Unidos. Doug Ford amenazó con imponer fuertes sanciones a quienes impidan el libre flujo de productos y personas.
Desde el lunes, cientos de conductores que se oponen a las restricciones de Canadá por el COVID-19 y descargan su enojo contra el primer ministro canadiense Justin Trudeau han bloqueado el Puente Ambassador, que conecta a Windsor, en Ontario, con la ciudad estadounidense de Detroit, afectando a la industria automotriz en ambos lados de la frontera. Cientos de camioneros más han paralizado el centro de Ottawa durante las últimas dos semanas.
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Ford dijo que convocará al gabinete provincial el sábado a fin de promulgar con urgencia medidas que dejarán “muy en claro” que es ilegal bloquear infraestructura crucial. Quienes violen la orden enfrentarán hasta un año de prisión y una multa máxima de 100.000 dólares, detalló.
“Déjenme ser lo más claro posible: Habrá consecuencias por estas acciones, y serán severas”, advirtió Ford. “Este es un momento crucial para nuestra nación”.
Las medidas también brindarán autoridad adicional “para considerar retirar los permisos de conducir personales y comerciales a todos aquellos que no acaten”, de acuerdo con la oficina del premier.
Por su parte, el alcalde de Windsor planeaba solicitar un requerimiento la tarde del viernes para tratar de acabar con el bloqueo del puente, dado que la escasez de autopartes causada por la protesta obligó a General Motors, Ford, Toyota y Honda a cerrar sus plantas automotrices o cancelar turnos laborales.
Autoridades federales, provinciales y municipales han titubeado en retirar por la fuerza a los manifestantes autoproclamados Caravana de la Libertad ahí y en otras partes del país, reflejando una aparente falta de personal de la policía local, la veneración de Canadá por la libertad de expresión y el temor a la violencia. El alcalde de Windsor, Drew Dilkens, advirtió esta semana que algunos de los camioneros están “dispuestos a morir”.
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Sin embargo, la presión política para reabrir el puente parecía incrementarse, junto con las pérdidas económicas. El gobierno del presidente estadounidense Joe Biden ha exhortado a Trudeau a terminar con el bloqueo, y el gobernador de Michigan ha hecho asimismo un llamado a una solución pronta.
El puente Ambassador es el cruce fronterizo de mayor actividad entre Estados Unidos y Canadá, por el que circula el 25% de todo el comercio entre los dos países. El bloqueo sucede en un momento en que la industria automotriz ya batallaba para mantener la producción ante una escasez de microchips y otras alteraciones de la cadena de distribución causadas por la pandemia de coronavirus.
