El dolor de espalda afecta a millones de personas y suele estar rodeado de mitos. Expertos aclaran cuáles son las verdaderas causas y ofrecen consejos prácticos sobre prevención, tratamiento y hábitos saludables para cuidar la columna.
El dolor de espalda es una de las molestias más comunes entre la población, pero alrededor de este problema de salud. La doctora Meghan Murphy, neurocirujana del Sistema de Salud de Mayo Clinic en Mankato, aclara algunos de los más frecuentes y ofrece recomendaciones prácticas.
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Mitos y hechos sobre el dolor de espalda
Levantar peso es la principal causa del dolor de espalda
Mito. La postura incorrecta al cargar objetos puede influir, pero las principales causas están relacionadas con el sedentarismo, la obesidad, la mala postura y factores genéticos.
El reposo absoluto mejora el dolor de espalda
Mito. Guardar cama por completo puede empeorar la rigidez y prolongar el dolor. Se recomienda mantener actividades suaves como caminar o nadar para favorecer la recuperación.
Sentarse sobre una cartera voluminosa causa dolor de espalda
Mito.Puede provocar entumecimiento en la pierna o la cadera al comprimir el nervio ciático, pero no suele ser la causa directa de dolor lumbar.
El dolor de espalda siempre es señal de una enfermedad grave
Mito. En la mayoría de los casos está relacionado con distensiones musculares o esguinces y tiende a mejorar por sí solo.
No se debe hacer ejercicio con dolor de espalda
Mito. La actividad física controlada ayuda a fortalecer el core, mejorar la flexibilidad y prevenir recaídas.
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La cirugía es la única solución para el dolor crónico
Mito. En la mayoría de los casos, tratamientos como la fisioterapia, medicamentos o cambios en el estilo de vida son suficientes.
Un colchón firme es la mejor opción
Mito. La elección depende de cada persona. Lo importante es encontrar un colchón que combine soporte y comodidad.
La postura no influye en el dolor de espalda
Mito. Pasar horas encorvado frente a una computadora o un celular puede sobrecargar músculos y articulaciones, generando dolor con el tiempo.
Cómo mantener una espalda saludable
Los especialistas recomiendan tres hábitos básicos para prevenir molestias:
- Mantener un peso corporal adecuado, evitando la sobrecarga en la columna
- Fortalecer los músculos del core, lo que ayuda a estabilizar y proteger la espalda
- Mantenerse activo, ya que moverse con frecuencia es clave para conservar la salud articular y muscular
El dolor de espalda no siempre se puede prevenir —especialmente cuando está relacionado con lesiones, artritis o factores genéticos—, pero adoptar un estilo de vida saludable puede marcar la diferencia en su manejo y prevención.