La Comisión de Iniciativas Comunitarias, Salud Mental y Adicción que preside el senador independiente, José A. Vargas Vidot, llevó a cabo una vista pública con el fin de combatir el monopolio que aseguran existe con los servicios de salud mental.
El Proyecto del Senado 1314 propone enmendar la “Ley de la Administración de Seguros de Salud de Puerto Rico”, “a los fines de terminar con el monopolio en la salud mental y abrir paso a que las aseguradoras tengan que contratar directamente con distintos proveedores de salud mental e instituciones hospitalarias en igual condiciones”.
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“En realidad Puerto Rico tiene un modelo de negocio… ha desarrollado, para la salud mental, un modelo de negocio no un modelo de salud, así que los éxitos están confinados a cuánto se ganan o cuánto se pierde… los actuarios son los reyes de eso y no el efecto que tiene en el paciente”, expresó Vargas Vidot.
La Comisión citó a deponer a la Administración de Seguros de Salud de Puerto Rico (ASES), a la Junta Examinadora de Psicólogos de Puerto Rico, que no pudieron comparecer, al Hospital Panamericano, a la Oficina del Procurador del Paciente y a la Administración de Servicios de Salud y Contra la Adicción (ASSMCA).
En la ponencia de la Oficina del Procurador del Paciente, la procuradora Edna I. Díaz de Jesús, aseguró que “es importante mencionar que, el Plan Vital que administra la ASES contrata con las aseguradoras Triple S, MMM, First Medical y Plan de Salud Menonita. De esas cuatro aseguradoras contratadas, Triple S, First Medical y Menonita subcontratan exclusivamente a APS (American Physical Society) Healthcare para manejar todo lo relacionado a servicios de salud mental. Sin embargo, la aseguradora MMM maneja la provisión de dichos servicios contratando directamente con sus proveedores médicos y hospitales. Conforme a la Exposición de Motivos de la pieza legislativa, APS tiene el control total de todos los pacientes del Plan Vital, con excepción de MMM, respecto a estos servicios. APS no solo provee servicio directo mediante clínicas, sino que también actúa a nombre de los planes médicos frente a las hospitalizaciones y otros proveedores de salud mental que no pertenecen a APS”.
La procuradora, quien favorece el proyecto, mencionó que la “enmienda propuesta permitiría a los proveedores de salud mental competir de una manera más justa, lo que obligaría a las aseguradoras a contratar a más de una compañía de red de proveedores y del mismo modo poder contratar proveedores independientes. Esto a su vez garantizaría un mayor acceso a servicios de salud mental adecuados y suficientes para los pacientes en Puerto Rico”.
Díaz de Jesús ofreció datos de que su oficina ha recibido, entre el 2020-2023, cerca de 8,838 querellas de ciudadanos por alegadas violaciones a la Carta de derechos y Responsabilidades del Paciente. De esas querellas 524 (el 6%) son de pacientes con algún diagnóstico de salud mental.
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Asimismo, informó que las querellas son respecto a la “negación de medicamentos de parte de las aseguradoras, denegación de acceso a servicios de salud ambulatorios, manejo clínico inadecuado en pacientes institucionalizados, la insatisfacción con las facilidades de salud y cita tardía”.
Por su parte, el director del Hospital Panamericano, Astro Muñoz, expresó que “este proyecto hace justicia a los pacientes de la salud mental y fomenta mayor acceso a los servicios”.
“Favorecemos este proyecto porque entendemos que va a la médula de la fragmentación que históricamente se ha mantenido en la mayor parte de los sistemas con relación a lo que es el servicio de salud física y el servicio de salud mental”, señaló Muñoz.
En cuanto a lo que mencionó la Procuradora del Paciente respecto a la APS, Muñoz añadió que “es un hecho de que APS es un proveedor de salud, también es un hecho que APS se comporta como una aseguradora; literalmente APS es un intermediario que se comporta como una aseguradora y no está regulado por el Comisionado de Seguros… y entonces ¿quién los regula? Hay impunidad en estos intermediarios porque no hay quien los regule y nosotros los proveedores no tenemos un foro donde llevar nuestros planteamientos, porque nadie los regula”.
La comparación que utilizó para referirse a lo que es APS fue “como decimos en el buen puertorriqueño, ladra, tiene rabo, brinca cuando tú le silbas, pero no es perro”.
Muñoz indicó que actualmente hay muchos pacientes de salud mental crónica “son invisibles, vulnerables, no les importa a nadie y se mueren”.
No obstante, los representantes de la ASES y ASSMCA presentaron ponencias generales que no se enfatizaban en el tema en cuestión. Incluso, no lograron responder favorablemente a las preguntas de los senadores.
A lo que la senadora independentista, María de Lourdes Santiago Negrón, expresó que “me parece una actitud profundamente irresponsable de ASES y una falta de respeto al proceso legislativo, una ponencia de ASES genérica y que no dice absolutamente nada”.
Vargas Vidot concordó con lo que indicó la senadora y finalizó la vista diciendo que “el proyecto de nosotros lo que pretende es, básicamente, provocar que más proveedores sean considerados en forma equitativa y balanceada”.
