Para entender un poco más la gran importancia de los riñones, hay que recordar que estos órganos desempeñan un papel fundamental en el equilibrio del organismo porque son los encargados de depurar y filtrar la sangre y desechar, a través de la orina, las sustancias tóxicas.
Alberto García Iglesias, enfermero especialista en diálisis y master en la Universidad Internacional de Valencia, explicó a Health cuáles son las patologías que pueden surgir, sus síntomas y dos consejos super claves para su cuidado.
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Síntomas y cuidados
Entre los cuidados que se deben tener en la vida diaria, se encuentran evitar la sal, mantener un peso saludable y estar hidratado.
El aumento durante la noche o aumento/disminución de la cantidad de orina en uno de los síntomas más importantes que avisan de que los riñones no están funcionando. Otras de las advertencias son la retención de líquidos que se manifiesta con hinchazón en piernas, tobillos, pies y párpados principalmente, el aumento de cansancio o fatiga (dificultad respiratoria), la anemia, las náuseas o vómitos, además de la pérdida de apetito o de peso.
Entre sus cuidados, hay que tener muy presente:
· Evitar la sal: reducir el consumo disminuye muchos de los factores de riesgo. También hay que evitar el consumo de alimentos ultraprocesados por su alto contenido en sal y sodio.
· Mantenerse hidratados: esto ayudará al correcto funcionamiento de los riñones. Se optimiza la función de filtrado y prevenimos la aparición de depósitos de sales minerales que puedan provocar cálculos renales.
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· No abusar de medicamentos: el tratamiento de larga duración del dolor crónico con antiinflamatorios no esteroideos puede causar daño al riñón. Se debe consultar al médico el mejor método de alivio del dolor.
· Alimentación: las frutas y las verduras frescas son los alimentos que más favorecen la función depurativa de los riñones, ya que además de contener una importante cantidad de agua, son ricas en potasio que aumenta la producción de orina.
