Una de cada ocho mujeres padecerá algún desorden de tiroides a lo largo de su vida, por lo que observar su funcionamiento es fundamental para atenderlo a tiempo.
Sin embargo, es probable que hasta un 60% de estas desconozca de su padecimiento o relacione algunos síntomas con alguna otra enfermedad. Por eso, hay que conocer los síntomas relacionados con las enfermedades tiroideas y consultar a un médico en caso de que asome una sospecha, explicó la endocrinóloga Milliette Alvarado, del Hospital Dr. Federico Trillas, de la Universidad de Puerto Rico.
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La especialista señaló que las mujeres son de cinco a ocho veces más propensas a padecer de enfermedades relacionadas con la tiroides. “¿Por qué es más común en las mujeres? Porque las variaciones hormonales y cambios en la inmunidad que ocurren después del embarazo y en la menopausia, nos hace más propensas en comparación con los hombres”, señaló Alvarado, quien mencionó otros factores de riesgo, como historiales de problemas autoinmunes.
Igualmente, las mujeres están cuatro veces más predispuestas que los hombres a desarrollar nódulos en la tiroides. La proporción es similar cuando se trata de diagnósticos de cáncer en la glándula tiroides, de acuerdo con los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés). Según los datos de los CDC, cada año en Estados Unidos 12 mil hombres y 33 mil mujeres reciben un diagnóstico de cáncer de tiroides. Las estadísticas colocan a Puerto Rico como el tercer país con la tasa más alta de casos de cáncer de tiroides.
Existen varios desórdenes que afectan esta glándula, como el hipertiroidismo, hipotiroidismo, recrecimiento de la glándula, tiroiditis y los nódulos. El hipotiroidismo es el desorden tiroideo más común que existe, indicó la endocrinóloga. Esta condición provoca una disminución o carencia de producción de hormonas. La paciente podría presentar síntomas de cansancio excesivo, depresión, aumento de peso, estreñimiento, desaceleración del ritmo cardiaco, dolor muscular y en las articulaciones, olvidos y piel reseca.
“Esos signos levantan bandera para hacer exámenes más detallados con el médico”, dijo Alvarado. Tanto en Estados Unidos como en Puerto Rico, la causa más frecuente de hipotiroidismo es la enfermedad conocida como tiroiditis de Hashimoto. Por otro lado, el desorden de hipertiroidismo provoca una producción hormonal excesiva que acelera las funciones corporales, como el metabolismo y el ritmo cardiaco.
La especialista indicó que, en las mujeres, las enfermedades de tiroides pueden desarrollar problemas en su ciclo menstrual, de fertilidad o durante los embarazos. Asimismo, a partir de la menopausia, el riesgo de osteoporosis podría aumentar. Alvarado sostuvo que es frecuente que los síntomas que presentan los pacientes con afecciones de la glándula tiroidea se confundan con otras enfermedades. Pruebas de laboratorios, sonogramas y otros estudios específicos ayudarán a determinar si esos síntomas responden o no a un desorden en la tiroides, recomendó.