Una empleada de Starbucks reveló todas las quejas de los clientes que son más comunes, pero lo simplificó en cinco frases. Keicha Halsell, también conocida como Keke Not Palmer en TikTok, aparece en un video trabajando en Starbucks y revela las peores cosas que le han sucedido en la sede de Seattle.
Las quejas más molestas de Starbucks
Halsell es barista de la cadena de cafés más famosa del mundo y, aunque cree que los videos pueden traerle una serie de problemas, contó los “icks” más molestos de la gente a la hora de comprar su bebida.
PUBLICIDAD
La cuenta de Keke Not Palmer en TikTok tiene casi 20,000 seguidores y más de 1 millón de likes, su clip más viral fue cuando dijo: “Estoy bastante segura de que puedo meterme en problemas por este video, pero lo haré de todos modos”.
Continuó contando las cinco principales quejas que la irritan mientras prepara las bebidas:
Llegan a la caja y, aun así, se toman “otros cinco minutos completos para decirnos lo que quieren”. Recientemente, un centenar de trabajadores de Starbucks ha viralizado en redes sociales las constantes quejas de su lugar trabajo.
Los que piden leche de almendras, avena y soya
Otra cosa que le molesta a Keicha Halsell es que, en vez de leche normal, agreguen leche almendras, avena y soya, pero luego piden la espuma fría de crema de leche: “los que no pueden beber lácteos, no deberían agregar leche y crema espesa a sus bebidas”.
El más común también es cuando los clientes quieren probar “cosas nuevas” del menú y termina no gustándoles, luego tendrá que hacer una bebida “cinco veces más” hasta que el cliente quede satisfecho: “me pone de nervios”.
PUBLICIDAD
Bebidas virales de TikTok
La siguiente molestia son las bebidas virales de TikTok, pues exigen una bebida misteriosa que no está en el menú y ella debe ver el video por dos minutos solo para “complacer”.
Halsell explicó: “No conocen la receta, así que tengo que sentarme allí durante dos minutos y ver a un barista en TikTok hacer una bebida que tomó dos minutos preparar y luego tomar dos minutos para escribirla y cinco minutos para hacerlo”.
