La tradición se renueva una vez más.
Este próximo domingo, 5 de enero de 2025, a las 6:00 p.m., el reconocido trovador Julio César Sanabria, junto a las hermanas Ángeles y Wilmarie Santoni, celebrará su emblemática Promesa de Reyes “Del campo a la ciudad”, una expresión cultural que por casi tres décadas se ha convertido en un pilar de la identidad puertorriqueña.
Este año se conmemora el 28.º aniversario de esta hermosa tradición compartida por los tres artistas y defensores del folclor.
La celebración tendrá lugar en la Capilla San Francisco de Asís de la parroquia Cristo Rey, en la urbanización Parque Ecuestre de Carolina, Puerto Rico. La actividad comenzará con una misa solemne a las 6:00 p.m. en honor a los Santos Reyes Magos. Al finalizar, Sanabria ofrecerá su ya esperado momento musical, interpretando diez aguinaldos improvisados dedicados a los Reyes Magos de Oriente, una expresión única donde la fe y la música se entrelazan en devoción.
Fiel a la tradición puertorriqueña de la Epifanía, los asistentes podrán llevar ofrendas de comida y bebida como agradecimiento por las bendiciones recibidas y en homenaje al simbolismo de los Reyes Magos como mensajeros de esperanza, luz y renovación espiritual.
La Promesa de Reyes será transmitida en vivo a través de las redes sociales oficiales de juliocesarsanabriaoficial, permitiendo la participación de puertorriqueños dentro y fuera de la isla. Durante la actividad se rendirá homenaje a los Reyes Melchor, Gaspar y Baltasar, evocando su histórico viaje hacia Belén e invitando al público a reflexionar por la paz, el amor, la salud y la unión familiar al comenzar el nuevo año.
“La Promesa de Reyes es un llamado a mantener viva nuestra fe, nuestras tradiciones y nuestra herencia cultural. Los Reyes Magos nos enseñan que en cada ofrenda de amor, humildad y sacrificio hay un acto de esperanza que nos une como pueblo”, expresó Julio César Sanabria, quien extendió una invitación abierta a participar de esta significativa celebración.
Este evento, que integra y celebra las costumbres del campo y la ciudad, resalta la esencia de la identidad puertorriqueña y brinda a las nuevas generaciones la oportunidad de acercarse a la tradición de invocar a los Reyes Magos como intercesores en momentos de necesidad o gratitud, demostrando su vigencia en la vida contemporánea.

