El rodaje de Diario, mujer y café, que marca el debut como directora de la actriz y productora puertorriqueña Roselyn Sánchez, no solo dio vida a una comedia cargada de emociones, sino que forjó una hermandad real entre sus protagonistas. A días del estreno, las actrices coinciden en que la química que proyectan en pantalla surgió de manera orgánica.
Filmada en apenas 19 días en escenarios de Río Grande, Dorado y San Juan, la producción reúne a figuras como Karla Monroig, Marisé “Tata” Álvarez, Angelique “Burbu” Burgos, la mexicana Angélica Vale y la dominicana Clarissa Molina, quienes encarnan a las “Tiki Tikis”, un grupo de amigas que se reencuentran para emprender un viaje por la isla que se convierte en una experiencia de risas, sanación y redescubrimiento personal.
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Aunque se conocieron en persona a pocos días de comenzar a rodar —tras coordinarse previamente por mensajes—, la complicidad se estableció sin esfuerzos. “Fue un clic instantáneo”, recordaron las actrices en entrevista con Metro Puerto Rico, añadiendo que Sánchez, aunque muy clara en su visión, les dio la libertad de aportar su toque personal y hasta improvisar, siempre que se mantuviera el espíritu del guion.
El reto no fue menor. Algunos personajes, como el de Monroig, demandaban transiciones emocionales intensas, pasando de la risa al llanto en segundos. “Espero en Dios que haya quedado como yo lo sentía… hubo una escena muy particular en la que pasé de la risa al llanto recordando un momento personal muy doloroso”, confesó la actriz. Otros roles, como el de Álvarez, requerían transmitir la libertad y audacia de una mujer en plena reinvención. “Estaba en un momento de mi vida en que decidí retomar mi rumbo y hacer lo que me diera la gana”, compartió.
Burgos, por su parte, sintió que su papel tenía algo de sí misma y lo asumió como una manifestación cumplida: “Cuando leí el guion, sentí que Blanca tenía algo de Burbu, algo de Angelique”, dijo con su característico sentido del humor.
Molina enfrentó el desafío de incorporarse como la “nueva amiga” en un grupo con una historia compartida, un escenario que reconoce como universal. “Es el típico escenario donde hay amigas y llega una de fuera… pero a veces, se aceptan nuevas amigas”, relató a Metro Puerto Rico, destacando que su personaje, Jimena, busca la paz y la armonía y, poco a poco, gana la confianza de las demás.
Angélica Vale, que interpreta a una mexicana radicada en Puerto Rico, describió el proyecto como un regalo que le permitió revivir memorias de su infancia en la isla. “Por supuesto que me siento local”, afirmó, al resaltar la calidez de la gente y el encanto de los paisajes, elementos que todas coinciden en describir como un personaje más de la historia.
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La película, que contó con el respaldo de fondos del Plan de Rescate Americano (ARPA, en inglés) canalizados por la Comisión de Cine de Puerto Rico, generó más de 3,600 empleos —2,897 directos y 775 indirectos— y representa, en palabras de Sánchez, una “chispa para incentivar el cine local”. Más allá de su valor como producción independiente, las actrices coinciden en que la trama y los personajes tienen un atractivo universal: la amistad, las segundas oportunidades y el amor por las raíces.
La directora se suma a un selecto grupo de cineastas que, en los últimos meses, han pisado fuerte en la escena cinematográfica local con poderosas historias contadas desde un necesario lente femenino: Annabelle Mullen y @mor, Glorimar Marrero y La Pecera, Vivianne Bruckman con Parto, Carla Cavina y su documental en cartelera Golpe de Agua, y próximamente Lorraine Jones con la esperada cinta Esta Isla.
Diario, mujer y café, ya en cartelera, también cuenta con la participación de Eric Winter, Ali Warrington, Norwill Fragoso, Hermes Croatto, Vin Ramos, Francis Rosas, Julián Gilormini y, en una aparición especial, Charytín Goyco.
La película llega con la promesa de que el público se verá reflejado en alguna de las “Tiki Tikis” o en la dinámica de grupo que proponen. Como resumió una de sus protagonistas, “todos tenemos, aunque sea, un amigo como uno de estos personajes, y podemos reír, emocionarnos y reconocernos en ellos”.