Una mujer y creadora de contenido, 30 años de edad, fue encontrada sin vida por las autoridades de Japón, país al que viajó con la intención de asistir al Gran Premio, ya que era fan de la Fórmula 1.
Los restos de la joven de apenas 30 años de edad se encontraron calcinados, por lo que rápidamente se realizó una investigación que desembocó en el arresto de un sospechoso.
El 2 de mayo las autoridades hallaron los restos calcinados de la influencer brasileña Amanda Borges da Silva de tan solo 30 años. Su cuerpo fue encontrado en su departamento en Narita, prefectura de Chiba, pues su pasión por la Fórmula 1 la llevó hasta Japón para disfrutar el Gran Premio en el Circuito de Suzuka.
Amanda Borges da Silva se distinguía por crear contenido referente a la Fórmula 1, pues publicaba análisis de carreras y opiniones acerca de las escuderías y perfiles de los pilotos. Cabe destacar que un día antes de su muerte, aseguró que Japón era un país muy seguro y que le gustaría vivir ahí, pues en días recientes había perdido una mochila y la encontró intacta con dinero y sus documentos.
¿Qué le pasó a la influencer Amanda Borges da Silva?
Investigaciones de las autoridades locales determinaron que la influencer falleció por asfixia debido a la inhalación del humo. Por el momento las indagaciones continúan y los encargados del caso no descartan el intento de encubrimiento del crimen, agresión o uso de drogas de parte del sospechoso.
De esta manera medios japoneses extendieron que un ciudadano de Sri Lanka de 31 años fue arrestado bajo el cargo de incendio provocado, no obstante, aún es investigado por homicidio con fines de robo.
El hombre arrestado se declaró a sí mismo testigo de los hechos y argumentó que no pudo actuar rápido debido al shock que le causó la escena; sin embargo, la policía aún considera la hipótesis del robo que finalizó en un crimen fatal, pues tanto el bolso como el celular de Amanda desaparecieron de la escena.
Mientras se esclarecen los hechos, el gobierno de Goiás y el Ministerio de Relaciones Exteriores de Brasil unen esfuerzos para la repatriación del cuerpo.