La plena puertorriqueña contagió de ritmo y alegría a la tripulación del avión cazahuracán cuando la meteoróloga, Deborah Martorell, y la arquitecta, Astrid Díaz, encabezaron una “parranda” sorpresa el pasado sábado en el Aeropueerto Rafael Hernández, en Aguadilla.
“Fue un momento muy simpático donde disfrutamos en unión de pueblo en una actividad de gran importancia por el tema y de gran calor humano por lo que significa salvar vidas ante la preparación de huracanes”, comentó la arquitecta Díaz en sus plataformas digitales.
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Con gran entusiasmo, el público que se dió cita en la actividad se unió a ambas profesionales que llevaban su mensaje de preparación ante los huracanes.
La tripulación, en especial la comandante puertorriqueña, Amarilys Cotto Pérez, bailaron y se unieron al típico “baile en grupo” junto con los asistentes del evento. Cotto Pérez es la primera mujer boricua en ascender al puesto de Oficial Meteorológico de Reconocimiento Aéreo para misiones del avión cazahuracanes.
“Bailala, bailala, pero bailame esta plena que está buena de verdad”, fue parte del coro que retumbaba en el aeropuerto.
La meteoróloga del Centro Nacional de Huracanes (NHC, por sus siglas en inglés), Gladys Rubio, confirmó que la temporada será hiperactiva por la posible formación de La Niña y las aguas cálidas en la cuenca del Atlántico.
“El pronóstico de NOAA saldrá en mayo 23. Ahí sabremos que espera NOAA para esta temporada ciclónico. De hecho, se está hablando de que se puede desarrollar La Niña para lo que es el pico de la temporada, agosto y septiembre. Sabemos que en los años Niña, tenemos más ciclones tropicales en la cuenca del Atlántico. También, sabemos que las aguas del Atlántico están cálidas, como si fuera julio y agosto, y ese es otro factor que también posibilita la formación de ciclones tropicales”, detalló Rubio en entrevista con TeleOnce.
“En estos casos, siempre hay que estar preparados y Puerto Rico está en el paso de los ciclones tropicales. Activa o no activa la temporada, hay que prepararse”, agregó.