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Nanowar of Steel: Los creadores del “reguetón noruego” que se burlan de los clichés de dos géneros enemigos

Son la banda de…¿rock? que se toma a sí misma menos en serio que todas las demás. Y esa ha sido la clave de su éxito.

Nanowar of Steel

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Hay una eterna pelea cultural entre dos bandos que no se han ayudado mucho a sí mismos si se habla de sentido común: los reguetoneros y los metaleros.

Que si el reggaeton es música, o verdadera música, que solo los rockeros hacen buena música “porque ahí están desde Queen y Led Zeppelin hasta Metallica”... Pero hay una banda que junta precisamente lo más absurdo y teatral de ambos mundos, y de muchos otros, y se burla de todo eso: Nanowar of Steel, que hace dos años se hicieron virales por su hit “Norwegian Reggaetón”, donde combinan toda la parafernalia del black y death metal nórdico con el twerking y la ostentación.

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Y letras sin sentido que necesitan de mucho ingenio para hacer reír. Y a esto se ha dedicado la banda italiana y sanmarinense desde 2003 y se dedican al heavy metal cómico. De hecho han parodiado el hard rock y en sus letras ponen referencias tan disímiles como Gandalf, de Lord of the Rings, o Sailor Uranus, de Sailor Moon.

Incluso parodian a sus bandas referentes, como Manowar, al lanzar su primer demo como “Triumph of True Metal of Steel” (burlándose del disco The Triumph of Steel) ante la grandilocuencia de la banda. Y de todas las demás, claro. También han parodiado hits como The Number of The Beast, de Iron Maiden (The Number of the Bitch) o Master of Puppets, de Metallica (Master of Pizza).

Metro los entrevistó justo en una época en la que el reggaetón está en la cima del mundo. Y en su particular estilo, cuentan su historia a través de Edoardo Carlesi (Gattopanceri666 en Youtube).

P: ¿Cómo formaron la banda? ¿Por qué decidieron hacer parodias?

–Formamos la banda en una época en la que éramos jóvenes e imbéciles. Ahora somos solo imbéciles. Decidimos hacer parodias porque no podemos hacer cosas que no sean en este formato. Somos tan pobres (intelectualmente), que tan solo podemos intentar reírnos de bandas magníficas que hacen cosas increíbles y discos estupendos como Lord of Steel, de Manowar, y Saint Anger, de Metallica.

P: ¿Quién escribe las letras y cómo meten tantas referencias?

–El proceso de escritura de las letras y de la música es compartido: o sea, los cinco nos juntamos cada vez para escribir todo hasta que no salga mal. Igual, cuando alguno de nosotros tiene una buena idea, y como tener ideas buenas en la música actual es malo, hacemos un esfuerzo conjunto para arruinarla. Esto, hasta que parezca una canción tan mala y aburrida que podría parecer una canción del último álbum de Iron Maiden.

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Ponemos referencias, básicamente, para no ser originales y copiarnos de los demás.

P: ¿Qué es hacer reír para ustedes?

–Hacer reír es sobre todo decir cosas que todo el mundo piensa (o igual no lo piensa pero sí las sabe de forma subconsciente), pero nadie se atreve a decir.

P: ¿Por qué suelen parodiar tantos imaginarios de géneros como el hard rock y el metal?

–Porque nos gustan y nos criamos con ellos. Luego, al hacernos mayores, logramos entender que las letras de dichos géneros son tontas y por eso  nos pusimos a hacer letras aún más tontas.

P: Se hicieron súper conocidos por Norwegian Reggaeton. Ahí se burlaron de dos géneros opuestos. ¿Por qué lo hicieron?

–Lo hicimos –como todo lo que hacemos– porque nos hacía reír. Y por supuesto, porque necesitábamos una razón para llamar unas bailarinas muy guapas para bailar con nosotros.

P: El reguetón es un género global. Hay todavía una discusión de si es “verdadera música”, sobre todo por parte de los rockeros acérrimos. ¿Cómo creen que Norwegian Reggaeton ha aportado a esta discusión?

–Creemos que no aportó nada, pero por lo menos mucha gente se lo pasó bien. Entonces, igual sí podemos decir que de alguna forma, el reguetón es divertido y puede ser un género musical útil para reírse y mirar traseros bonitos, que no está nada mal, sobre todo para los rockeros. En el rock hay pocas risas y pocos traseros y de vez en cuando hay que compensar esta falta.

P: También tienen muchas referencias de cultura pop en sus videos (Sailor Uranus y Gandalf llegaron a mi corazón), ¿cómo las combinan para hacer sus parodias?

–Nos sale natural. De vez en cuando nos salen ideas por casualidad, en plan “aquí estaría bien Gandalf”, aunque no pega nada con el resto del video. Estaría bien porque estaría bien, sencillamente. Es algo de estómago y corazón.  No hay mucha reflexión intelectual detrás de muchas referencias que ponemos.

P: ¿Por qué es tan necesaria la parodia y más la musical?

–Para reírse y gozar más de lo que se escucha. Yo creo que mucha gente se toma demasiado en serio el rock, como si fuera una religión o un partido político.

Pero lo bueno de la música rock es que no es nada de eso y reírse de lo que nos gusta es justo lo que nos hace seres humanos menos aburridos.

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