La temporada de Deshaun Watson terminó el mes pasado. Su retorno de una cirugía de hombro está en marcha.
Tras pasar semanas en rehabilitación del hombro derecho en Los Ángeles, Watson regresó el sábado a Cleveland para llevar a cabo un evento de Navidad con cerca de 300 niños, mientras sus compañeros viajaron a Houston.
PUBLICIDAD
El brazo derecho de Watson sigue con cabestrillo tras la operación del 21 de noviembre para reparar el hueso glenoideo. El quarterback de 28 años fue titular en seis encuentros antes de que llegara a su fin su segunda campaña con los Browns.
“Todo va como a tiempo”, indicó Watson. “Bueno, todo va como queríamos en el último mes y el hombro se siente muy, muy bien. Entonces seguiremos trabajando un día a la vez y de ahí veremos”.
Mientras Watson ha estado fuera, los Browns (9-5), que han sufrido lesiones de jugadores clave desde el primer día, se mantienen la pelea por la postemporada en la Conferencia Americana. Con una victoria el domingo ante ls Texans (8-6), se podrán acercar a su segunda aparición en playoffs desde el 2002.
Watson reconoció que ha sido difícil ver desde lejos.
“Siempre es difícil, estar alejado de tus compañeros y del fútbol”, reconoció. “Trabajas duro para ser parte de esto. Pero al mismo tiempo, las lesiones suceden y sólo tienes que lidiar con lo que resulta de esto”.
PUBLICIDAD
Watson se lesionó en la primera mitad del encuentro del 12 de noviembre en Baltimore. A pesar del dolor completó sus 14 pases en la segunda mitad y los Browns remontaron para vencer a los Ravens. Posteriormente, la resonancia magnética reveló la fractura.
Los Browns esperan que Watson esté listo para ser titular la próxima temporada. Mientras, hace lo que le pidieron.
“Está en las manos de los doctores”, indicó. “Cuando me digan que me puedo quitar el cabestrillo. Me lo quitaré. Hasta entonces seguiré cada regla y cada precaución que quieran que siga”.
Watson ha disputado sólo 12 de 34 posibles partidos desde que firmó con los Browns, que lo adquirieron el año pasado en un controversial con Houston por 230 millones de dólares garantizados.