El mundo del boxeo enfrenta una difícil situación, después de que un pugilista fue inducido al coma, tras sufrir un nocaut durante el fin de semana.
El colombiano Luis Quiñonez se enfrentó a su compatriota José Muñoz a 10 rounds, por el título nacional welter junior, en una función realizada en el Coliseo Elias Chegwin, cuando la pelea terminó por la vía del cloroformo.
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En el octavo asalto, Quiñonez recibió demasiado castigo, dejó de tirar golpes y se desplomó en la lona, ante la reacción del referí en turno.
Prontamente, el cuerpo médico lo sacó del cuadrilátero en camilla, ante la preocupación de su rival y los asistentes.
Tras casi 72 horas del incidente, el reporte médico, recopilado por el Diario Marca, apunta a que el pugilista fue operado de emergencia, y se encuentra en coma inducido.
El pronóstico, de acuerdo al reporte “es muy reservado para la vida y la función con alta morbimortalidad”, aunque sus familiares apuntan que ya ha comenzado a mover los dedos.
Quiñonez, de 25 años de edad, cuenta con un récord profesional de 10 triunfos y una derrota.
