Una emotiva noche fue lo que vivió el baloncelista José Juan Barea en lo que fue su último partido de temporada regular en el Coliseo Roberto Clemente.
En lo que llamaron el “Barea farewell night” los Cangrejeros de Santurce rindieron homenaje a quien por los pasados dos años ha sido su armador estelar. El equipo hizo una recopilación de las mejores jugadas de Barea tanto en la NBA como en la selección nacional de Puerto Rico y las difundió en la pantalla grande del Clemente. Las imágenes fueron acompañadas por saludos de personas que han sido parte integral de la carrera de Barea. Entre estos estuvieron la leyenda de la NBA, Dirk Nowitzki, Marc Cuban, Carlos Arroyo y Rick Carlisle.
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Las imágenes que más provocaron emoción en el jugador y le sacaron las lágrimas fueron las de su familia, especialmente sus padres quienes lo acompañaron en el homenaje que se realizó en el mediotiempo del partido contra los Grises de Humacao.
Barea también estuvo acompañado por su esposa Viviana Ortiz y sus tres hijos.
En conferencia de prensa posterior al juego, Barea agradeció a la gerencia de los Cangrejeros por el homenaje y a la fanaticada por el cariño que le han brindado por los pasados años.
“Tengo suerte que estas cosas especiales siguen pasando, los otros días fue en Mayagüez y ahora fue aquí. Estoy bien contento con todo”, expresó Barea.
El baloncelista no descartó que sus próximos pasos en el baloncesto sea su faceta como dirigente. En el pasado, fue dirigente de los Indios de Mayagüez en el Baloncesto Superior Nacional (BSN).
Anoche, los Cangrejeros de Santurce vencieron a los Grises de Humacao con marcador de 99-85. Barea anotó 24 puntos y repartió 7 asistencias.
