El conflicto bélico entre Rusia y Ucrania ha traído diversas repercusiones en la sociedad. Incluso, el deporte ha sido afectado, al grado de que varios deportistas han tenido que huir de la zona de guerra.

Dentro de toda la gente que se fue se encontraban dos futbolistas argentinos, quienes relataron en sus redes sociales la odisea que pasaron.

Fabricio Alvarenga, elemento del FC Rukh Lviv, vivió un viacrucis para poder salir de Ucrania, con la intención de llegar a Polonia y encontrar resguardo.

En 16 horas, el delantero recorrió poco más de 80 kilómetros. Acompañado de su novia, el argentino avanzó en carretera, con un frío de tres grados.

Su pareja, la brasileña Aline Vittorazzo, comentó que fueron horas complicadas, pues una familia fue la que los ayudó a evacuar la ciudad, para tomar un camión que los cruzaría a Polonia.

Todavía en la frontera las cosas no estaban claras, pero el atacante y su pareja lograron refugiarse. Ahora están esperando poder viajar a Argentina, para así poner fin a uno de los momentos más complejos de su vida.

“Fabri, Manu, Meg y yo pasamos en un auto, junto con una familia que nos ayudó. No pude dormir, tenía dolor en el pecho, sabiendo que mis amigos estaban afuera. Mis pies y piernas estuvieron muy fríos todo el tiempo. Aunque tenía una manta en las piernas no hice nada de calor.

”Vivimos un cansancio gigantesco, físico y psicológico. Gracias a Dios por pasar por migración. El ejército en la frontera está prohibiendo fotos, videos. Toda esta situación, sin duda, trae un sentimiento más fuerte que cualquier otra necesidad física. El objetivo era escapara de la guerra a toda costa”.

—  Aline Vittorazzo, pareja de Fabricio Alvarenga

Di Franco huyó por Rumania

Francisco Di Franco fue otro de los futbolistas que tuvo problemas para abandonar Ucrania, tras el inicio de la guerra contra Rusia.

El delantero utilizó su cuenta de Instagram para pedir ayuda, ya que varios proyectiles cayeron cerca de su departamento.

La angustia lo invadió cuando comenzaron los ataques rusos, pero por fortuna pudo huir del país, pues encontró una alternativa con la frontera con Rumania.

Franco estaba solo cuando empezaron los estallidos, pero su equipo, el SC Dnipro-1, lo trasladó a un búnker, en el que se resguardaron por unas horas.

“Fueron dos explosiones seguidas. A los cinco minutos nos llamó el staff del equipo para ir directamente a la base del club. Ahí hubo más detonaciones, nos resguardamos en un búnker del club.

“Quiero agradecer a todas las personas que se comunicaron conmigo y con mi familia. Gracias a los que ayudaron a difundir, a periodistas y medios de comunicación que me dieron el espacio para visibilizar mi situación y la de muchos argentinos. Finalmente, luego de mucha angustia e incertidumbre con mis compañeros logramos volver con nuestras familias”.

—  Francisco Di Franco, futbolista argentino