Catalogando como una falta de comunicación y transparencia de parte de las autoridades turísticas del país, un grupo de tour operadores, guías turísticos y miembros de la Asociación Puertorriqueña de Agente de Viajes (APAV) y la Sociedad Americana de Agentes de Viajes (ASTA) se unieron hoy, martes, para emplazar al Gobierno sobre las medidas restrictivas en torno a este sector.
Los representantes de las organizaciones condenaron que a una semana de haber tomado la mala acción del Gobierno de Puerto Rico al introducir nuevas directrices a las líneas de cruceros sin que mediara comunicación con ellos y ocasionando la cancelación a este momento de al menos 15 visitas de cruceros a la isla hasta el 6 de enero de 2022.
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El grupo señaló que la contribución total del turismo de crucero, tránsito y puerto base, para el 2019 en Puerto Rico representó $ 151 millones. El impacto de las cancelaciones de las excursiones para una operación que estaba paralizada por casi 18 meses debido al COVID 19 y que recién comenzaba a reactivarse es devastadora y deja al descubierto la mala acción del Gobierno para nuestra industria. Al momento se estima que las pérdidas económicas, incluidos los servicios de tours operadores y guías turísticos en estas 15 visitas canceladas por el gobierno pueda rondar los casi $20 millones.
Para la Presidente de Rico SunTours, Sasha Rodríguez, las acciones unilaterales y sin comunicación con los sectores turísticos han provocado grandes pérdidas por las múltiples y súbitas cancelaciones de los cruceros de Royal Caribbean, Celebrity, Carnival Cruises y Azamara Cruises. “No solo hay que considerar las paradas canceladas, sino las fechas claves donde las ventas de excursiones es una de las más altas del año. El 30 de diciembre teníamos 5 grupos de 1 misma excursión. Al fin había llegado el tiempo de bonanza para nosotros y de buenas a primeras por culpa del gobierno se ha convertido en pérdidas que no van a ser compensadas por nadie”, denunció Rodríguez.
Continuó diciendo la Presidente de Rico SunTours que el fin de año implica esperar 12 meses para una nueva oportunidad de este tipo de ventas. Ya nos ha sucedido múltiples ocasiones, después de mucho esfuerzo, coordinaciones y la preparación que conlleva este tipo de actividad, de golpe y porrazo el Gobierno lo hecha todo por la borda. Llevamos años arrastrando la misma situación por un motivo u otro; desde el huracán María, los momentos de la renuncia de Ricardo Rosselló, hasta el manejo de COVID. Golpe que pone en riesgo la estabilidad económica de este importante sector
Por su parte el Lcdo. Carlos Cruz sub administrador de United Tour Guides denunció que el cierre de los puertos, sin duda alguna, en su empresa, implicaría en una pérdida de 60 empleos directos e indirectos entre socios trabajadores, empleados, guías, choferes, suplidores, contratistas, subcontratados, vehículos de lujo y de cabida mayor. El impacto de nómina semanal equivale a un promedio entre los $50,000 a $60,000 En adición, esto implicaría un gasto promedio mensual para la cooperativa de alrededor de $15,000.00, que sin ventas es imposible sufragar.
“Luego de casi dos años sin poder generar ingresos en nuestra industria, otro cierre unilateral y sin que nadie del gobierno consultara con la industria, provocará una crisis económica de la cual no podremos recuperarnos”, denunció Carlos Cruz sub administrador de United Tour Guides.
Por otra parte, Ángel Alverio, pasado Presidente de ASTA y APAV se volvió a solidarizar con el reclamo hecho por las distintas organizaciones de la industria las cuales al momento están a ciegas, sin información y el plan de acción que tomará el gobierno por las decisiones tomadas sin consultar con todos los sectores que se han visto impactados en los pasados días.
Alverio destacó que durante la pandemia las líneas de cruceros llegaron a acuerdos con el Centro para el Control de Enfermedades (CDC) y gobiernos de la región para establecer protocolos estrictos relacionados a los viajeros y sus tripulaciones. En los pasados meses más de 1 millón de pasajeros han navegado en cruceros manteniendo niveles ínfimos de contagio, demostrando que los protocolos de las líneas de cruceros han sido efectivos y han sido exitosos.
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“Ha tomado dos años poder reestablecer una relación de confianza con Royal Caribbean y otras compañías de cruceros para que Puerto Rico siga siendo uno de los lugares en donde sus embarcaciones atraquen, la preocupación aumenta al ver como la República Dominicana ha recibido, atendido y dado espacio a los barcos que se le negó la entrada al puerto de San Juan. No podemos estar celebrando un día que es el mejor año en turismo y al otro hacer esto”, denunció Alverio.
Para nosotros se verán afectados sobre 50 empleos directos e indirectos entre guías turísticos, chefs y personal de restaurantes del Viejo San Juan que colaboran con nosotros. Todos dependemos de la industria de cruceros. Cualquier merma en trabajo, larga o corta pone en riesgo el personal necesario para llevar a cabo las operaciones luego de los grandes retos de reclutamiento que hemos confrontado a raíz de la pandemia. Nos unimos 100% a las expresiones, denuncias y exigencias realizadas por la Alianza Turística y necesitamos unir esfuerzos para juntos salvar nuestros empleos”, confirmó Michelle Llamas, Presidenta de Get Shopped, PR.
Añadió la Presidente, Get Shopped PR Inc. que la situación de perder las visitas de los barcos en tránsito nos afecta sobre manera y ha redundado en pérdidas económicas a nuestra empresa en aproximadamente $10,000 mil semanales. “A esto se añade la terrible incertidumbre de cuándo podremos volver a trabajar y como podremos mantener los empleos de jefes de familias puertorriqueñas que una vez más se quedan en la calle y que quizás no podrán volver a reclutar cuando la situación se normalice porque ellos no podrán sentarse a esperar de brazos cruzados para cubrir el sustento de sus familias”, enfatizó Llamas
Daphne Barbeito, portavoz de la Alianza Turística por Puerto Rico destacó y denunció que estos números en pérdidas son solo por los días que el Gobierno decidió unilateralmente hacer cambios en protocolos sin previa notificación. Si esto se extiende a la semana del 10 de enero, que se esperan 10 cruceros, las pérdidas podrían incrementarse en otros $ 12 millones de dólares para un total de casi $25 millones.
Siempre hemos expresado la importancia y la responsabilidad de proteger la salud y seguridad del pueblo Puertorriqueño, pero también entendemos que se han tomado decisiones drásticas contra una industria altamente fiscalizada, regulada y supervisada por las entidades de salud federal. El haber tomado mejores decisiones en el momento antes de que los casos se hayan disparado fuera de control, contrasta con la ligereza que el gobierno ha atendido este asunto más sin haber sido consultados ni informados. “Exigimos claridad en los planes que se estén desarrollando para estabilizar y compensar las pérdidas, pero más aun necesitamos que se informe como están las negociaciones con las empresas de cruceros y que posibilidad existe de normalizar la llegada de los cruceros a la mayor brevedad”.
“La propagación del virus está ocurriendo en eventos multitudinarios, en la falta de controles en los pasajeros que llegan vía aérea y no con la llegada de los cruceros, esto es un asunto local. Nos llama la atención como el Gobierno dice estar preocupado con los contagios pero permite la entrada a la isla de personas sin pruebas negativas por el aeropuerto. Todos los reportes de contagios en los cruceros están por debajo del 1%, esos pasajeros se aíslan y no pueden desembarcar. No existe otro destino, producto o servicio ahora mismo con el nivel de transparencia sobre el COVID como lo es la industria de cruceros. El gobierno ha castigado a miles de trabajadores puertorriqueños, que volverán a ser cesanteados, por la percepción pública y la presión mediática, pero no dice como va a apoyar a estos empresarios para que no se pierdan los empleados ni las empresas, concluyó diciendo”, Barbeito portavoz de la Alianza Turística.
